Por Edgardo Cabrera

Las decenas de suspirantes morenistas a una candidatura no se deben llamar a la sorpresa, empezando por los lambiscones y oportunistas que desviaron flagrantemente recursos públicos para su promoción, tampoco pueden decirse sorprendidos luego de que la semana pasada les propinaran el segundo golpe en el simulador proceso interno de Morena, ahora para designar candidatos a diputaciones federales.

El primero revés fue el de los aspirantes al senado, miles de bardas, lonas y calcomanías no les sirvieron de nada a arribista como Sergio el mal bailador, los que no movieron ni un dedo fueron impuestos para la reelección: Ana Lilia Rivera y Álvarez Lima.

Lo mismo ocurrió para los “bendecidos” con la candidatura de la coalición en cada uno de los tres distritos federales, en el I quedó Alejandro Aguilar y en el III Irma Garay, ambos petistas, van por la reelección. En el II Ray Vázquez, cuñado de la gobernadora Lorena Cuéllar quien, cual humedad, se infiltró en los muros del Verde Ecologista para imponerlo como su propuesta dentro de su “merecida” cuota dentro de la coalición.  

Y mire que los propaganderos y las plumas ladinas de la Triste Historia se esmeraron en echarles porras y hasta venderles encuestas carísimas. Cómo olvidar a Luis Varguitas a quien de plano lo colocaron con dos dígitos de diferencia con su más cercano competidor, bueno, ya de plano hubo quien planteaba que le dieran de una vez la curul porque era “inalcanzable”, lo único que no alcanzó fue ser volteado a ver por la cúpula morenista, menos por los verdes y de ninguna manera por los petistas. ¡Papelazo!, el que hizo junto a su camarilla de soberbios.

Pero en las mismas está Eréndira, de nueva cuenta los propaganderos favoritos del gobierno estatal la pusieron como candidata en el III distrito, ni el dirigente estatal se atrevió a tanto como las plumas ladinas que la impulsaron a renunciar a la Función Pública, horas después constató el fraude de las lenguas viperinas.

La lista sigue, otros serviles decían que la modesta Madaí (la que presume que organizó y fue un éxito el mundial de voleibol de playa) era la “buena” al senado, luego tras el pronóstico fallido, aseguraban que le darían el distrito III, volvieron a fallar rotundamente, ahora ya la promocionan a una presidencia municipal, otros a una diputación local, y los más realistas la ven regresando a lo suyo: vivir de sus glorias pasadas.    

Gabriela la que cobra como titular del Centro de Justicia, cargo que atiende en sus tiempos libres, también soñó con la candidatura, igual en el III, o Sonia Lilian, directora administrativa de la procuraduría estatal.

Pero aún hay más que creían eso del proceso de encuestas, mire fue el caso de varios diputados locales:  Vicente Morales Pérez, Miguel Ángel Caballero Yonca, Jaciel González Herrera, Lenin Calva Pérez y Bladimir Zainos, todos fueron timados.

¿Quiere más nombres de ilusos?, que tal la funcionaria de SEPE y ex dirigente de Nueva Alianza, Sandra Corona; el ex dueño del extinto Partido Encuentro Social, José Luis Garrido, el director del Instituto Tecnológico Superior de Tlaxco (ITST), Blas Marvin, el alcalde con licencia de Tlaxcala, Jorge Corichi y el ex alcalde de Tepeyanco, Giovani Ixtlapale, por citar los más conocidos, pero hay otro tanto, hasta superar la cantidad de 50.

Ahora vienen las candidaturas locales, y la cosa será igual, llevan mano los reeleccionistas y los realmente allegados al poder, no los lambiscones soñadores.