Despiden a delegada sindical; SNTE promete atender el caso
21 de febrero - 2024

El Secretario General evadió a los sindicalizados

Por Selene Sosa

El pasado 19 de febrero la Delegada de la III-1, Gwendolyn Amaro Ramírez fue notificada de su despido, por lo que trabajadores adheridos al Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE) Sección 31 buscaron el respaldo de la dirigencia a cargo de Cutberto Chávez De la Rosa.

Aunque la responsable de la D-III-1 se mantiene en reserva, sus representados acudieron a la sede del SNTE en busca de la intervención de Chávez De la Rosa, sin embargo, fueron recibidos por su secretaria particular y la representante del área jurídica.

Las y los quejosos detallaron que el SNTE no ha entregado copia de la minuta de acuerdos respecto al asunto de la Contraloría Interna de la Unidad de Servicios Educativos de Tlaxcala (USET), a cargo de Homero Meneses Hernández, además de que, ha habido represalias por dicha movilización.

A pesar de que se había prometido que no habría represalias, los sindicalizados resaltaron que los primeros afectados fueron los trabajadores que conformaban la Contraloría Interna y, ahora, Amaro Ramírez, quien fue cesada de sus funciones.

En este sentido, las y los quejosos reprocharon que el sindicato ha estado ausente para defenderlos y representarlos, por lo que exigieron la presencia de Cutberto Chávez, a quien acusaron de no dar respuesta formal a las peticiones de la delegada sindical para que interviniera en el hostigamiento laboral del que es víctima por parte de Meneses Hernández.

En respuesta, la secretaria particular del Secretario General de la Sección 31, alegó que Gwendolyn Amaro no buscó al SNTE para intervenir y que el hostigamiento por parte del funcionario de la 4T ya es un asunto «mutuo», invalidando con ello el atropello a los derechos laborales de la responsable de la D-III-1.

Asimismo, respecto a la petición de conocer la minuta de acuerdos, aseveró que se trata de un documento que, por cuestiones de jerarquía, no pueden dar a conocer, además de que, añadió, solamente tres trabajadores de la Contraloría Interna se acercaron al SNTE para informar sobre el conflicto.

Por último, la parte jurídica del sindicato se comprometió a atender el despido de Gwendolyn Amaro, siempre y cuando ella presentara argumentos justificados que respalden su asunto, toda vez que dijeron desconocer la denuncia en su contra por sedición ya que, de igual forma, ella no les informó.

Ante lo expuesto por parte del SNTE, las y los trabajadores de la Secretaría de Educación Pública del Estado y la Unidad de Servicios Educativos de Tlaxcala (SEPE-USET) comentaron que esperarán a que Chávez accione a su favor ya que, de lo contrario, buscarán el respaldo regional y, de ser necesario, el nacional.

Cabe señalar que, aunque los medios de comunicación presentes en la reunión fueron convocados por los inconformes, la secretaria particular de Cutberto Chávez recibió una llamada durante la reunión, en la que se le informó sobre una transmisión por parte de los medios.

Ello ocasionó que la sindicalizada abruptamente concluyera la reunión y saliera del salón dejando con la palabra en la boca a sus compañeros, alegando que se trataba de una mesa de trabajo entre sindicalizados y que ella no continuaría con la misma en presencia de los medios de comunicación.