Quedan pendientes cinco y despidieron injustificadamente a dos

Por Selene Sosa

De los 13 trabajadores adheridos al Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE) Sección 31 que fueron removidos de la Contraloría Interna de la Unidad de Servicios Educativos de Tlaxcala (USET), siete ya fueron colocados ‘de palabra’ en nuevos espacios laborales, diez en la misma dependencia y tres en escuelas.

Sin embargo, fuentes consultadas refirieron que aún no reciben el Oficio de Liberación de la Contraloría y el de la Nueva Adscripción, a las nuevas áreas donde estarán laborando en escuelas y dentro de la misma USET, a cargo de Homero Meneses Hernández, a pesar de que ya transcurrió una semana de ‘finalizado en conflicto’.

Además, es preciso recalcar que de estos 13, cinco trabajadores basificados permanecen en incertidumbre laboral, puesto que no han sido asignados a nuevos espacios laborales, ni siquiera ‘de palabra’ como el resto de sus compañeros que este día fueron informados respecto a los nuevos espacios donde se desempeñarán.

Es importante dar a conocer que, tal como se advirtió en los boletines de prensa por parte de la también Secretaría de Educación Pública del Estado (SEPE), ya hubo represalias en contra de trabajadores de dicha dependencia, se trata de dos vigilantes, quienes fueron puestos a disposición.

A colación, a estos dos elementos de vigilancia, quienes no tuvieron que ver con la movilización de los basificados de la D-III-1 hace dos semanas, se sumaron otros dos trabajadores de confianza pertenecientes a la Contraloría Interna, quienes fueron despedidos sin justificación.