22 de junio - 2023

Por Edgardo Cabrera
Llegó con honores y homenaje encabezado por la propia mandataria estatal, a solo cinco meses de aquello se fue por la puerta de atrás luego de que cinco de sus allegados fueran vinculados a proceso acusados de extorsión, así es la corta y triste historia de Ramón Celaya Gamboa, quien se convierte en el cuarto que está a cargo de la Secretaría de Seguridad Ciudadana, tres como secretarios y uno de interino.
Son pésimas noticias para Tlaxcala, porque desde antes de su llegada, el pasado 16 de enero, surgieron los cuestionamientos de quien también salió por la puerta de atrás del cargo de vicefiscal en el estado de Guerrero, a finales de octubre del año pasado, tras el asesinato de 23 personas en el municipio de San Miguel Totolapan, entre ellas el alcalde, su padre, un ex alcalde y otras 21, que en su mayoría eran funcionarios del ayuntamiento.
Ya en funciones, se reveló por medio de un oficio de la Fiscalía General de la República que existía una investigación sobre el “modus vivendi, operandi y sin contactar, así como vínculos de familiares, vehículos y personas allegadas”, lo que fue negado por Celaya y minimizado por el secretario de Gobierno, Sergio González, al declarar que no tenían conocimiento de aquello.
Tras su salida, el golpe no es para la gobernadora Lorena Cuéllar, sino para los ciudadanos que, como nunca, padecemos una ola de inseguridad y ejecuciones, marzo fue el peor mes, pero no se queda atrás mayo y junio, solo como muestra, esta mañana “apareció” un cuerpo sin vida calcinado adentro de un vehículo en Tetlatlahuca.
Por lo pronto, quien se queda a cargo del despacho en tanto nombran a un nuevo secretario es Ángel Zamora, que ocupaba la dirección de la Policía Estatal y de Caminos, personaje que llegó a la SSC en los tiempos del ahora prófugo y ex secretario, Alfredo Álvarez Valenzuela.
CHAPULINEAR
Fue miércoles de corcholatas presidenciales, llegaron a Tlaxcala la puntera de la encuestas y ex jefa de gobierno de la CDMX, Claudia Sheinbaum, y el diputado Gerardo Fernández Noroña.
Pero más allá de lo que dijeron e hicieron en la entidad, con su arribo inició la temporada de chapulines, y es que en víspera de la visita la diputada local petista Lorena Ruiz, hija del ex alcalde apizaquense Reyes, convocó de urgencia a una conferencia de prensa.
Resulta que la petista se encontró en una encrucijada, el mismo día y a la misma hora, en la misma entidad, estarían ambas corcholatas, pero para el caso del PT, la convocatoria para respaldar a Noroña fue emitida con carácter de orden para sus representantes populares y liderazgos.
Ante ello debió renunciar a su bancada y darle el respaldo a la morenista Sheinbaum, con lo que bateó a su correligionario y al dirigente estatal Silvano Garay y su hija, la diputada federal Irma, responsables de montar el tinglado en Tlaxcala.
El brinco de partidos y puestos será la constante de aquí hasta el próximo año cuando se realicen las elecciones presidenciales.
