29 de marzo - 2023

Por Edgardo Cabrera
Pues que ahora sí van a invertir para “echar a andar” las 125 plantas de tratamiento de aguas residuales, tras año y medio de gobierno, las mismas 30 que dejó trabajando la anterior administración son las que funcionan con la Triste Historia, es decir, no han hecho nada por mejor la situación.
Eso sí, en su informe anual de mentiras, dijeron que habían destinado 94.2 millones de pesos en esos sistemas de tratamiento, y este martes la mandamás, tras su reaparición en Tlaxcala tras dos fines de semana de homicidios y de su silencio, habló que van a enviar otros 210 millones de pesos de recursos estatales y federales. De forma incongruente, siguen operando solo una treintena, ¿a dónde se fue la primera inversión?
La verdad es que no se les cree, es simplemente otro de esos datos que dan al aire, porque en los hechos no hay plan, no hay idea, ni ingeniería, simplemente ocurrencias, y con ello tratar de justificar el viaje a Nueva York en un foro del que no se obtuvo nada, solo fueron a expresar buenas intenciones.
En eso de la reaparición de la mandamás, parece no preocuparle que en dos fines de semana violentos se registraran 11 asesinatos, ejecuciones y feminicidios, lo ve “normal” producto de la situación de violencia “nacional”, ¡no pues sí!, por ello estamos como estamos, la “normalidad”, esa es la que nos está llevando a la fregada, pero eso sí, insiste en su mundo guajiro que somos el estado más seguro del país, imagínese si no fuera así…
IMPUNIDAD
En febrero pasaron desapercibidos algunos cambios en cargos directivos de algunas dependencias estatales, no se dieron mayores explicaciones, porque era claro que trataron de encubrir la ineficacia, pero también la corrupción.
En la USET, por ejemplo, nos enteramos que cobraba como funcionaria la hermana del director del Cobat, Darwin Pérez, se trata de Diana Iris quien se desempeñaba como jefa del departamento de secundarias generales.
Es claro por qué llegó a esa posición: por cuota política, más que capacidad, al igual que su hermano que sigue haciendo del Colegio de Bachilleres el principal referente del mal trabajo y de la impunidad.
Según los propios medios oficialistas, la ex funcionaria no pudo comprobar el ejercicio de varios miles de pesos, no dan mayores datos de ese supuesto ni de dónde provienen las observaciones, lo que sí es un hecho, que cayó de la gracia de la mandamás, porque esas posiciones simplemente no se mueven si no es con su orden.
Y a más de un mes del despido, el hermano sigue en busca de su reinstalación, tan es así que el lunes aprovechó un foro en unos de los planteles del Cobat para suplicarle a Homero reconsiderar el caso, pareciera que ni las llamadas le toman para atender sus demandas.
Más que ocuparse de resolverle la chamba a su pariente, el señor Darwin debería atender sus propios problemas, la semana pasada la dirigente del Stacobat, Lovelia Sánchez puso en evidencia una serie de anomalías que van, desde el nepotismo solapado, hasta la flagrante violación al contrato colectivo con la intención de desaparecer el sindicato.
