Por Edgardo Cabrera 

Al tiempo que Celaya Gamboa negaba ante los diputados locales la presencia de delincuencia organizada en Tlaxcala e ideaba nuevas ocurrencias para el supuesto “nuevo plan estratégico”, en Tenancingo la policía municipal alertaba a la estatal del hallazgo de un cuerpo calcinado, uno más en esa localidad señalada por investigaciones policíacas, periodísticas, documentales e incluso académicas, nacionales e internacionales, como lugar donde operan redes de tratantes de mujeres con fines de explotación sexual en México y Estados Unidos.

Es el mismo lugar donde activistas y estudios como el de Lantia intelligence identificó en el mapa criminal de México grupos delincuenciales de influencia nacional que operan en Tlaxcala, y a tres familias dedicadas a la trata: la de los Granados, Hernández y Rojas Romero, cuyas redes se extienden hasta la unión americana y Europa.

Pero eso no fue todo, a escasos minutos de concluir su comparecencia, a las 14 horas, se daba cuenta de otro asalto violento en un domicilio del fraccionamiento La Virgen en Panotla; y en Apetatitlán, a dos cuadras de la alcaldía, a las 18 horas se reportaba el atraco a la casa de un líder empresarial. Por la noche, de nuevo en Tenancingo, un sujeto fue sorprendido con el cuerpo sin vida de una mujer que trataba de desaparecer.

Todo lo anterior, solamente en un día, el día en que Celaya Gamboa primero trató de victimizarse por las críticas a su labor, protagonismo y antecedente, pero también, el mismo día que trató de dar cátedra a los diputados y negó lo que los hechos y las pruebas revelan.

A TOLETAZOS

Es claro que el funcionario es pura pantalla, un gran simulador, porque también ante los legisladores advirtió que para el 8 de marzo ya tiene un contingente de mujeres policías, para que actúen como “contención” ante cualquier acto de “amenaza de daños a edificios o monumentos”, pero, aunque no hagan nada, ese contingente de uniformadas “escoltará” a las feministas en su marcha “desde su inicio hasta su final”. 

En 2021 criticaba en el programa de Fernanda Familiar el uso de la fuerza del Estado mexicano contra sus protestas en Ciudad de México, y acusaba al gobierno de López Obrador y de las entidades de carecer de políticas públicas para ellas, de insensibles y de simuladores, el viernes quedó claro quién es el gran simulador y Pinocho.

Para muestra, una más, negó que su esposa se haya amparado ante posibles órdenes de aprehensión dada que está ligada con Genaro García Luna, el ex secretario de seguridad pública de Felipe Calderón, detenido y en juicio en los Estados Unidos, y de quien fue colaboradora al fungir como comisionada de la Policía Federal. 

No obstante, además de lo publicado en 2022 por los diarios El Universal y Milenio, en una consulta pública el Poder Judicial de la Federación reportó no solo una solicitud de amparo, sino dos expedientes radicados en el 2022, ambos, ante posibles órdenes de aprehensión en su contra.

Lo que vimos en su comparecencia fue una clara muestra de que una cosa es la realidad y otra lo que este personaje quiere vender como su plan de combate a la delincuencia, es claro que no existe y que solamente se trata de ocurrencias al calor de su urgencia por legitimarse.