29 de noviembre - 2022

Por Edgardo Cabrera
A un año y tres meses de gobierno siguen sin operar al cien por ciento el Hospital “Anselmo Cervantes Hernández”, el mismo que les dejó construido y equipado Marco Mena para sustituir el añejo Hospital General capitalino, y al que pomposamente con el afán de presumir algo propio llaman ahora “IMSS-Bienestar” y el que va por su pretendida tercera inauguración.
Aunque en su momento trataron de negarlo luego de que lo evidenciamos, el primer corte de listón realizado en julio pasado fue mera pantalla para el titular del IMSS y para el secretario de Salud federal, al día siguiente el nosocomio tenía cerrada sus puertas y a los pacientes les vieron la cara ya que al llegar a pedir una consulta los bateó el personal de seguridad.
La primea inauguración la hicieron a sabiendas de que carecía de permisos sanitarios para operar, porque incumplían con la norma para operar algunas áreas.

Luego en agosto, tras la visita del presidente López Obrador, de nueva cuenta planearon llevarlo a que lo inaugurara, sin embargo, lo pusieron en alerta porque ese lugar un mes antes lo habían echado a andar, sin embargo, fueron timados, porque en la realidad no operaba, de ahí que el mandatario prefirió ir a Huamantla a “supervisar” el plan de salud IMSS-Bienestar.
El domingo y ante la urgencia del primer informe de gobierno, mediante un comunicado de prensa difundieron que Lorena Cuéllar fue a “verificar los avances del plan de contingencia” del citado hospital, que en los hechos significa que fue a ver si ya opera, por lo que, de nueva cuenta, le organizaron otro de esos recorridos “a modo”, para engañarla, hasta le pusieron actores simulando pacientes.

INOPERANTE
Aunque quieren hacer pasar espejitos como oro, en los hechos las únicas áreas que operan son las clínicas de displasia, labio-paladar hendido, otorrinolaringología y patología, eso nos lo confirmó el propio personal médico que trabaja en el lugar, no los cuentos chinos de su propaganda.
Hablamos que a 1 año 3 meses de gobierno y con todo que el hospital no lo construyeron ni equiparon ellos, solamente han logrado que opere a 10% de su capacidad, porque, por ejemplo, de las 90 camas de hospitalización, ninguna está funcionando, menos las áreas quirúrgicas, y aunque presumen que dan consultas externas, la realidad es que esas se ofrecen en el viejo nosocomio.
Tampoco operan urgencias, clínica del dolor, medicina preventiva, consulta externa, rayos X, estadística, archivo clínico, laboratorio, vacunas, planificación familiar, terapia intensiva adultos, terapia intensiva neonatal, y, REITERAR, lo más importante HOSPITALIZACIÓN, pese a ser un hospital, el Anselmo Cervantes trabaja al igual que cualquier clínica de rancho, pero claro, eso no lo dirán en el primer informe, ya saben, la idea es el costoso maquillaje de Nueva Historia.
