NUEVO MERCADO
13 de enero - 2022

Por Edgardo Cabrera

La capital del estado no está dispuesta a perder de nueva cuenta una inversión millonaria para reconstruir el mercado municipal que se cae a pedazos, ¡y cómo no!, si el “Emilio Sánchez Piedras” tiene 50 años de antigüedad.

El año pasado y por la terquedad de un grupo de locatarios, se perdieron 120 millones de pesos de recursos federales que ya estaban autorizados para la obra. 

Recordemos que la entonces presidenta Mildred Vergara buscó convencer sin éxito a los inconformes, incluso ya les había conseguido las instalaciones de lo que fue Soriana Mercado para que se trasladaran temporalmente a ese lugar para seguir vendiendo.

Los pretextos no faltaron, y la cercanía del proceso electoral frenó cualquier intento del ayuntamiento de poner mano dura y ejecutar la obra, el resultado fue la pérdida de esos millones de pesos, Sedatu los destinó para otros proyectos en el país.

Ahora parece que las cosas serán diferentes, nos enteramos que el proyecto va, es urgente y apremiante, el único centro de abasto popular que tiene la capital del estado de Tlaxcala está tan mal, que incluso se alista un estudio porque se presume la contaminación del agua potable ante el deterioro de las tuberías y su colindancia con el drenaje, no es para menos, la red hidráulica tiene décadas de existir.

Pero si persiste la intransigencia de mejorar en pro de la salud y seguridad de los consumidores y de los propios mercaderes, amén de que la ciudad cuente con un lugar digno, no habrá pleito, pero tampoco negociación, lo que sí, un nuevo mercado y por predios no paran, así que para el 2023 habría nuevo mercado, ya sea el reconstruido o uno segundo, quizá en la Loma.

Apizaco es ejemplo de pueden convivir dos centros de abasto popular, hace años una cerrazón similar por parte de los locatarios derivó en la construcción del Mercado 12 de Mayo en los años 80, conocido coloquialmente como “Nuevo”, a escasas tres cuadras de distancia.

BARRIL SIN FONDO

Los partidos políticos, en particular dos que perdieron su registro en el plano nacional, son barriles sin fondo, no hay dinero que les alcance y sus resultados están a la vista.

No falta mucho para que los denominados: Redes Sociales Progresistas y Fuerza Por México obtengan su reconocimiento como partidos políticos locales, luego de que perdieran su acreditación ante el INE y su lucha legal para seguir existiendo fracasara.

Porque la ley así lo establece, dados los votos que obtuvieron, tienen derecho no solo a un asiento en el Consejo General del Instituto Tlaxcalteca de Elecciones, sino a una bolsa económica por medio de prerrogativas a RSP le etiquetaron 1 millón 149 mil 192 mil pesos para este año, y a FxM 4, millones 47 mil 978 pesos.

Y si bien esa es la bolsa global, nos dicen en el ITE que sufrirá ajustes, de entrada enero no les darán ni un quinto, y será a partir de la obtención de su registro que tendrán una partida económica, ojalá con esa misma “prontitud” administrativa, rindan frutos a los ciudadanos, lo que finalmente es un sueño guajiro.

En los hechos, RSP, por ejemplo, solapa a su primer alcalde, el de Hueyotlipan, exhibido en video violentando a una regidora; los de Fuerza por México, son simples comparsas del gobierno morenista.