Por José Luis Ahuactzin

Pese a que este viernes se convierte en en último del año 2021, los políticos y actores de la política siguen haciendo de las suyas a más no poder, como si se tratara de competencias por convertirse en el peor de lo peor.

Por ejemplo, los transportistas del sur, ahora conformados en el Frente Común de Permisionarios, dieron el espaldarazo a la gobernadora Cisneros por ese mega descuentazo del 70 por ciento en todos sus trámites, y que el 1 de enero de 2022 comenzarán los beneficios ‘personalísimos’ a un grupo selecto de quien hoy dirige el rumbo de la administración estatal.

Qué pasa con aquellos ciudadanos que generan empleos, que pagan sus impuestos al corriente, pagan seguridad social, dónde están los beneficios fiscales o de descuentos a aquellos dueños de transportes de unidades particulares que van al corriente en sus pagos.

Por qué no incentivarlos por pagar puntualmente sus derechos y obligaciones como ciudadanos, o se requerirá que primero pasen al besamanos y a la zalamería para después beneficiarlos como grupo selecto.

Lo peor es que quienes se dicen ‘luchadores sociales’ como son los líderes transportistas, más bien seguirán siendo utilizados como botín político para próximos comicios; de ahí que pudo haber surgido sus descuentazos y el reconocimiento -según ellos- público para agradecer dicha aprobación de descuentos.

Eso si, al tocarles el punto del aumento al pasaje los transportistas ahora han tomado  la decisión de no aumentarlo porque se sienten escuchados al otorgarles ese 70 por ciento de descuento.

Trascendidos 

Qué diputado será que al celebrar su cumpleaños, en su casa, esta se salió de control ante tanto chamaco pasado de copas que, hasta, según cuentan andaban a gatas…

Que al finalizar este año, en dependencias del Poder Ejecutivo ya comenzaron de nueva cuenta los despidos, pero al mismo tiempo las demandas laborales…

Que ante la omisión de diputados por no aprobar las cuentas públicas de enero a septiembre, de las anteriores autoridades municipales, doña Chabelita ya se lavó las manos como Poncio Pilatos, porque con un documento que recomendaba a los levantadedos de la Comisión de Finanzas y Fiscalización, reformar la Constitución local para quitar ese texto que les obligaba a dictaminar las cuentas públicas, pero se les olvidó.

Aprovechar para mandarles los mejores deseos para el 2022. 

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