DOBLE DISCURSO
8 de noviembre - 2021

Por Edgardo Cabrera

Insostenible se encuentra Alfredo Álvarez Valenzuela, su nombramiento como secretario de Seguridad Pública de Tlaxcala es severamente cuestionado, no solo por estar implicado en un caso de tortura en Guerrero que lo llevó a prisión en 2014, o en las indagatorias por la ejecución extrajudicial de los normalistas de Ayotzinapa, Alexis Herrera Pino y Gabriel Echeverría de Jesús, ahora, una mancha más, salió a relucir una denuncia por hostigamiento sexual.

La semana pasada la periodista Montserrat Ortiz destapó la existencia de una carpeta de investigación judicializada en contra del actual funcionario lorenista y radicada el 25 de agosto de este año por el presunto delito de hostigamiento sexual agravado de cuando se desempeñaba en la Secretaría de Seguridad Federal. 

Ignorando la indagatoria, la gobernadora Lorena Cuéllar le tomó protesta como responsable de combatir la delincuencia, sin embargo, tras su llegada los muertos se le acumulan a la administración morenista, 1 por día en promedio, desde encajuelados y feminicidios, hasta comando armados irrumpiendo en casa de políticos, como en el caso del ex alcalde de Panotla, Eymard Grande, cuyo padre fue asesinado y el resto de la familia brutalmente agredida. 

En el nuevo escándalo, la víctima narró a la periodista de Televisa que en el año 2020 el hostigamiento en su contra comenzó durante una gira de trabajo en la ciudad de Tijuana, Baja California, y que el intento se repetiría al menos tres veces más, aprovechando su posición de poder como director adjunto de la subsecretaría de migración, sistema ferroviario y robo a carreteras y transporte.

La denunciante fue directora técnica de la unidad de política policial, penitenciaria y seguridad privada en la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana, y tras denunciar a Álvarez Valenzuela fue removida de su puesto, reasignada y finalmente despedida.

HECHOS ENTIERRAN EL DISCURSO 

Este asunto llama la atención, recordemos que apenas el pasado 2 de septiembre, al tomarles protesta a los nuevos funcionarios estatales, la gobernadora Lorena Cuéllar pronunció un discurso a favor de las mujeres, y les advirtió a sus subordinados que “no se detendría” para “actuar en consecuencia si algún compañero no las respeta”.

“Ustedes escucharon un discurso donde hablé mucho de las mujeres y hoy les pido mucho respeto para todas las compañeras… confío que sean las personas correctas que haya elegido por su honestidad, transparencia, por la pulcritud de sus actos, porque dejen huella en lo que hagan”, les advirtió, pero los hechos hablan más que mil discursos.

PROTECTORES

Sobre Alfredo Álvarez Valenzuela, además, hay una solicitud de comparecencia formalizada la semana pasada ante el Congreso del estado y presentada por el coordinador de la fracción parlamentaria del PRDJuan Manuel Cambrón, para que exponga la estrategia de seguridad, no obstante, con este nuevo asunto la petición cobra mayor relevancia.

La realidad es que la mayoría morenista junto con sus aliados no ven bien citar al funcionario y, evidentemente, es un tema que tampoco le interesa a la gobernadora a quien no le ha ameritado ningún comentario, ni los delitos de alto impacto cometidos en su corto gobierno, como tampoco los abusos a los derechos humanos documentados, también, en contra de la corporación que encabeza este funcionario.

No olvidemos ese video, también escándalo nacional, donde se ve la supuesta capacitación a policías a base de rociarles gas lacrimógeno, sin permitirles el uso del equipo apropiado para ello, y a cambio exigiéndoles que ¡aguante, aguanten!, el castigo, un elemento perdió la conciencia por ese cuestionado método.