Por la contingencia, acuerdan autoridades cerrar santuario a visita de feligreses y turistas

Por Alfredo González

Previo al anuncio -hace unos días- por parte de la Secretaria de Salud federal, que debido al incremento de contagios por Covid-19 se llevaría a cabo retroceso a naranja en el semáforo epidemiológico para algunas entidades; autoridades civiles y eclesiásticas en Tlaxcala, acordaron suspender los festejos en honor a la Virgen de Ocotlán que en el cambio de año congrega a un número considerable de feligreses.

Y es que al igual a lo ocurrido en la meca de la patrona y emperatriz de México la Virgen de Guadalupe, con la finalidad de evitar aglomeraciones y potenciales contagios del mal que registra un repunte que preocupa a las autoridades de salud, este jueves y el primer día del año permanecerán cerradas las puertas del atrio de la Basílica de Ocotlán, sus zonas aledañas y el santuario.

El acuerdo en reducir y escalonar las visitas de feligreses y creyentes los días anteriores al 31 de diciembre para que, con un cerco de bioseguridad diseñado específicamente para Ocotlán, se permitiera la asistencia mediante ‘goteo’ y de forma escalonada, empero al cambio de año y el primer día del 2021 se deberá evitar la asistencia de turistas y fieles al recinto ya mencionado.

Es de recordar que, en plena congruencia, la grey católica en Tlaxcala y su cabeza, también accedieron a cancelar la llamada «Feria Blanca» que con motivo de la Navidad se había reiniciado en las instalaciones del Seminario de la «Y griega» en el municipio de Yauhquemehcan en la que catedráticos, directivos y estudiantes reciben con brazos y puertas abiertas a las familias tlaxcaltecas y visitantes de otros lares.