Eso lo dijiste tu, no yo: Nuevo reto
27 de mayo - 2020

Por Alfredo González 

Todo parece indicar que la próxima semana la sociedad tlaxcalteca experimentará los primeros visos de la nueva realidad a raíz de un eventual y muy lento proceso de vuelta a las labores, poco a poco, la vida laboral comenzará a tomar forma en el estado, y con ello, el caos de cotidianidad tomada nuevamente por asalto las vidas de más de 1.4 millones de habitantes en el estado.

Podría ser a partir del próximo lunes que sectores esenciales de la industria, servicios y organismos públicos pongan de nueva cuenta en marcha sus actividades, primeramente en sectores como la industria automotriz, el ramo de la construcción y otros rubros que se consideran esenciales y que se suman a la industria de alimentos y productos perecederos.

Así también comenzará a suceder con algunos comercios y establecimientos que sí acataron las disposiciones y suspendieron sus actividades durante la época más ruda de la pandemia…otros, simplemente les valió madre y nunca cerraron… eso si, deberán seguir estrictas normas para evitar aglomeración de personas en restaurantes y cafeterías, algo así como solo el 30 por ciento de su capacidad, por eso del distanciamiento social.

El reto radicará en combatir la necedad de la gente, la incesante e imperiosa  necesidad de pasarse por algún sitio las reglas u quebrantarlas, la naturaleza de jugarle al chingon del mexicano, nada nuevo en realidad.. ese, señoras t señores, será el reto de una indisciplinado sociedad que como perro amarrado espera a que abran la puerta para hacer sus desmanes.

Un reto titánico representada para autoridades de los tres órdenes poner a las mulas tras las trancas a partir de que se dé luz verde a que la gente abandone sus casas… o al menos los que sí siguieron la cuarentena, pues de manera indudable, hubo miles que jamás siquiera se lavaron las manos para evitar ser víctimas de contagio, habrá siempre a quienes no les importe en lo más mínimo su seguridad y la de los demás.

Si es que es el caso, y el lunes se comienza a reincorporar la industria y las actividades laborales a las actividades permitidas, tómelo con calma, ni la pandemia ni los contagios han desaparecido no lo harán el futuro próximo…sin embargo, debemos aprender de nueva cuenta a vivir en sociedad con las debidas precauciones, lávese las manos, respete la dichosa sana distancia…es por su bien, carajo.

Desgarrador

Como comunicador y relator de tantos hechos he presenciado incontables muertes y decesos, hechos trágicos y finales fatídicos que en más de una ocasión horrorizan la mente y llegan hasta atormentar en los recuerdos, la labor de informar te enfrenta cara a cara con la muerte de las personas en finales tan diversos, escalofriantes e incluso absurdos, ninguno de ellos equiparables al martirio por el que han pasado cientos de personas en Tlaxcala los últimos dos meses, la muerte asfixiante que causa el COVID-19. 

He de aclarar que no he sufrido ni me he contagiado de Coronavirus o algo similar jamás en mi vida, y espero no hacerlo, pero solo imaginar esos instantes de desesperación que narran los sobrevivientes de este mal pone tantas cosas en perspectiva…algo así experimente mientras escuchaba las palabras de Alfredo Lemus Saldaña, titular del IDET y quien se recupera tras ser ingresado por dar positivo a COVID-19. 

La falta de aire, esos segundos o minutos eternos intentando inhalar oxígeno una vez más, deben ser los instantes mas horribles de cualquier ser humano, como lo narra este hombre dedicado al deporte, alguien que no padece de comorbilidades y aún así, por poco no cuenta la historia de supervivencia…una muerte equiparable a los horrores del gas mostaza de un conflicto bélico.

No me cabe en el entendimiento aquellas personas que aún creen que la pandemia es un invento que puede ser ignorado, que los tenga sin cuidado, se trata de una situación real que puede horrorizar y cuyos testimonios rasgan hasta lo más profundo. 

Se ha dicho en incontables ocasiones y debe repetirse aún más allá del cansancio, esto es real y potencialmente mortal…es necesario, imperante cuidarse y evitar que esto crezca aún más, que el COVID-19 siga cobrando más vidas inocentes…pongamos un alto a la necedad,  a la imprudencia, por todos en Tlaxcala, en México y el mundo.

Ocioso

El ocioso y nada prudente ex diputado de los calzones sigue dando sendos palos de ciego con su desgastada táctica de ser el Mesías para incautos y desinformados…el oportunismo sin traje de payaso y máscara de huehue, así puede definirse el benefactor de agitadores y revoltosos que hacen de las suyas para generar caos por unas cuentas monedas…

Así se las sigue gastando el de Yauhquemehcan, un suspirante más del montón que fantasea con competir en la elección a la gubernatura de 2021… idea que le vendieron sus corifeos cuando tuvo un gris paso por el congreso local y con la que se ha emberrinchado y, peor aún, hay gente que le compra en cuento.

La última del «Calzones» fue hace unos días cuando juraba que las cifras de contagios y muertos por la pandemia de COVID-19 eran alarmantemente más altas de las que da a conocer la autoridad…fiel a su estilo de profeta autoproclamado, se aventuró a dar sus «cifras reales», las cuales coincidentemente eran idénticas a las dadas a conocer por la SESA una noche antes… situacion que se ha repetido en al menos cuatro ocasiones…de ese tamaño el profeta.

Una tras otra, sus pifias lo han colocado como el más polémico, bocón y lastimero aspirante a la primera magistratura, incluso, muchos en el argot y fuera de él lo han calificado como un payaso sin educación que hizo una fortuna a costillas de un ex gobernador corrupto que ocupó su empresa constructora para lavar dinero… ¿o creía acaso que hace muy buenas obras el muchacho?

Parece ser que tenemos chistes malos y ocurrencias para rato con este bufón, pues si bien el albizaul ya no le compra humo para hacerlo candidato de nueva cuenta, sí hay partidos riñón que creen que su polémica podría darle siquiera para conservar el registro, por que eso de ganar ya ni hablamos con el pobre «Don Calzones».