6 de mayo - 2019

Por Edgardo Cabrera
Para el anecdotario quedará la celebración del aniversario del Sindicato 7 de mayo el cual terminó entre las mentadas del cantante que contrataron para amenizar el convivio y los golpes que se llevó el insolente artista junto con parte de su staff.
Los hechos ocurrieron el viernes, ya entrada la noche y con varios tragos encima, cuando el cantante del grupo musical KUAL, les mentó la madre a los burocrátas y les dijo “haber bola de putos, pendejos…”, improperios que derramaron el vaso de agua, ya que durante la presentación artística no complació a los empleados al servicio de los poderes ejecutivo, legislativo, judicial y municipios.
El incidente simplemente abona a la iniciativa morenista que se encuentra en el Congreso de la Unión para prohibir que en los festejos de los empleados al servicio de gobierno se prohíba el alcohol, es más, que se supriman a lo máximo esas actividades fiesteras que son financiadas con cargo al erario.
Y si bien los burócratas podrán argumentar que esos convivios son organizados por sus sindicatos, la realidad es que el dinero que ahí se gasta forma parte de los acuerdos contractuales que se pactan con los gobiernos cuyos presupuestos son castigados para cubrir comidas de aniversarios, rifas y hasta viajes de placer de los líderes y sus allegados.
MITÓMANO POR EXCELENCIA
José Luis Garrido una vez más le quiso tomar el pelo a la ciudadanía. La semana pasada hizo uso de la ya pervertida Máxima Tribuna del estado para, según él, ofrecer defensa legal a los automovilistas para que se amparen contra el cambio de placas anunciado por el gobierno estatal.
Pero la realidad es que este levantadedos otra vez mintió, y es que acusó a la Secte de atentar contra la economía familiar por dicha disposición cuando, en realidad, se trata de una orden federal que deben acatar los gobierno estatales.
Un acuerdo federal publicado el 25 de septiembre del 2000, establece que todas las entidades del país deberán realizar el cambio de placas cada tres años.
Por tanto, si en verdad era la intención de Garrido proteger la economía familiar, una de dos: debió enfocar el exhorto al gobierno de Andrés Manuel López Obrador para tirar dicha disposición, o bien, en el presupuesto de egresos de este año debió impulsar un fondo para subsidiar el pago de la placas y que así no costaran a los automovilistas, pero ya vimos, prefirió apoyar los fondos “moches” para obras municipales y apoyos al campo.
Es claro que a este sujeto lo mueven dos intereses personales, por un lado su pretensión de ser designado dirigente del Partido Encuentro Social de Tlaxcala y, por el otro, posicionarse para ser candidato a la alcaldía capitalina ya que le preocupa el constante crecimiento en las encuestas de su “amiga” y diputada federal, la morenista Claudia Pérez.
ENGAÑABOBOS
A colación de Garrido, sus iniciativas y exhortos son simplemente engañabobos, recordemos algunas que así lo demuestran.
En Marzo de este año propuso que el Carnaval de Tlaxcala fuera declarado patrimonio cultural inmaterial, sin embargo dicho festejo obtuvo ese rango desde el año 2013.
En octubre del año pasado planteó, y no prosperó, asignarles a los consejeros honoríficos de la CEDH un sueldo, y qué creen, “casualmente” el ombuscopión presupuestó para este año una partida de más de 320 mil pesos mensuales para cada uno de estos funcionarios violando la Constitución del estado. Lo anterior parecería plan con maña, o bien, un claro contubernio con el levantadedos del PES.
También en octubre del año pasado, mujeres otomíes acudieron a la oficina del diputado para exigirle no encubrir al alcalde de Ixtenco de múltiples anomalías denunciadas. Fueron atendidas de mala gana hasta que se recostaron en el piso en señal de protesta, en venganza, ignoró sus reclamos y avaló que el edil quedara impune y reinstalado en el cargo.
Y para rematar, pese a las múltiples promesas de campaña (muchas de ellas en el programa Mesa de Redacción) para no repetir los excesos de los diputados que estaban en funciones, en cuanto llegó a calentar el asiento de su curul hizo todo lo contrario al irse de viaje a Mazatlán con cargo al erario, incrementarse la dieta y no hacer pública su declaración patrimonial.
