Fuente: PROCESO

Elementos de la Procuraduría General de la República (PGR) detuvieron a dos presuntos integrantes del Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG), entre ellos José Guadalupe Rodríguez Cruz, El 15, supuesto responsable de la desaparición de los italianos Raffaele Russo, su hijo Antonio y su sobrino Vincenzo Cimmino, quienes fueron vistos por última vez en Tecalitlán el pasado 31 de enero.

De acuerdo con investigaciones de la Policía Federal, José Guadalupe, presunto encargado de la coordinación logística para la venta y trasiego de estupefacientes, operaba en los municipios jaliscienses de Ciudad Guzmán, San Gabriel, Tecalitlán, Tolimán, Tonila, Tuxpán, Zapotiltic y Zapotitlán de Vadillo, así como en Manzanillo, Minatitlán y Tecomán, pertenecientes a Colima.

En conferencia de prensa, el director en jefe de la Agencia de Investigación Criminal (AIC), Omar Hamid García Harfuch, informó que, a través de trabajos de gabinete y campo, personal de las instituciones federales de seguridad obtuvo información que señalaba a José Guadalupe como el presunto responsable de entregar recursos económicos a efectivos de la Policía municipal de Tecalitlán, “quienes serían los probables encargados de entregar a los ciudadanos italianos a la organización criminal”.

De igual manera, destacó que, durante la captura de las dos personas en Zapopan, Jalisco, fueron aseguradas armas de fuego de diversos calibres, cartuchos útiles, estupefacientes, probablemente metanfetamina y mariguana, así como un vehículo.

Los detenidos fueron trasladados a la Ciudad de México y puestos a disposición del Ministerio Público de la Federación adscrito a la Subprocuraduría Especializada en Investigación de Delincuencia Organizada, para determinar su situación jurídica.

Tres semanas después de la desaparición de Raffaele Russo, de 60 años; su hijo Antonio, de 25, y su sobrino Vincenzo Cimmino, de 29, Francesco, otro hijo de Raffaele, interpuso una demanda ante las autoridades estatales, donde reconstruyó las últimas horas de sus familiares y aportó pruebas sobre la presunta participación de la policía estatal en el ilícito.