Sábado inicia exhibición de leoncitos blancos en Zoológico del Altiplano
20 de julio - 2018

La CGE convocó a un concurso para nombrar a la pareja de león y leona.

A partir de este sábado 21 de julio a medio día, las familias tlaxcaltecas y turistas podrán conocer a la pareja de cachorros de leona y león blancos que nacieron en el Zoológico del Altiplano de Tlaxcala, los cuales se exhibirán en la zona de felinos del parque.

El día de su presentación ante medios de comunicación, la pequeña pareja de leoncita y leoncito blancos nunca habían visto a tantos seres humanos tan cerca y concentrados en ellos. Con curiosidad, un poco de precaución, pero sin miedo, los cachorros salieron de su jaula transportadora, dieron unos cuantos pasos sobre la plataforma circular en la que fueron colocados por los médicos del Zoológico del Altiplano de Tlaxcala, y comenzaron a olfatear a las decenas de fotógrafos y camarógrafos de todos los medios de comunicación locales y nacionales que esa mañana llegaron tras el anuncio de que algo especial había sucedido en el Zoológico.

Pronto, flashes, lentes y un enjambre de teléfonos celulares apuntaron por más de diez minutos a los bigotes, mini melenas y garritas de los blancos hermanos para captar a detalle algo que nunca antes había sucedido en Tlaxcala, y en prácticamente ningún zoológico público de México, la presentación de una pareja de leones blancos nacidos en cautiverio.

Para los pequeños felinos, el extraño momento pronto se convirtió en algo cotidiano, pues aunque sus cuidadores se mantenían cautos ante la inesperada reacción de la parejita, no acostumbrada al trato con tantos humanos al mismo tiempo, los bigotudos leoncitos caminaban, se echaban, se molestaban uno a la otra y hasta querían mordisquear uno que otro lente de los fotógrafos que osaban acercarse demasiado a sus húmedas y rosadas narices.

Horas antes de su presentación, la leoncita y el leoncito que aún no tienen nombre y que para ello el Gobierno del Estado de Tlaxcala organiza un concurso a nivel internacional, que se puede consultar en el link http://goo.gl/GaV1Jj  se mantenían a resguardo de sus padres adoptivos, los médicos y cuidadores profesionales del Zoológico del Altiplano, quienes desde su primer día de vida, los alimentaron, arroparon y vigilaron para que, a cuatro meses de su nacimiento, se muestran fuertes y sanos, con un peso de 20 kilogramos y 60 centímetros de talla.

En el espacio donde actualmente duermen, los cachorros blancos aguardaban el momento de su presentación en sociedad, cuando todos los animales del Zoológico percibieran, a través de sus avezados sentidos salvajes, que dos nuevos integrantes de la familia de leones blancos formarían parte de la gran familia de especies habitantes del parque.

Aquella mañana, al despertar, los bebés leones, como siempre, se mordían y rasguñaban entre ellos mientras esperaban a que el médico César Toriz Hernández, Responsable del Zoológico del Altiplano, llegara con sus biberones de fórmula especial para felinos y, por supuesto, su kilo y medio de pechuga de pollo picada para un delicioso y balanceado desayuno. Después, para ayudar en su digestión, los cachorros recibirían un masaje en el abdomen, primero la leona, más traviesa y comelona, luego el león, más lento y berrinchudo para comer, como siempre sucede con los hermanos mellizos.

Un baño en seco, con toallas que estimulan el contacto y el vínculo entre cuidadores y cachorros, concluyó la jornada matutina para dejar listos a los blancos gatitos para el gran día que estaban a punto de vivir.

A unos 200 metros de distancia del dormitorio de los cachorros, los medios, expectantes, escuchaban las palabras del Coordinador de Ecología de Tlaxcala, Efraín Flores Hernández, quien les explicaba que como resultado del trabajo de conservación y preservación de la fauna que existe en el Zoológico del Altiplano, el 18 de marzo nacieron los dos cachorros de leones blancos, una hembra y un macho, los cuales registraron un peso de 500 gramos y una talla de 18 centímetros.

El momento llegó, la parejita ingresó a su jaula transportadora y de ahí a un camión especial para llevarlos a donde los esperaba su fiesta. Al arribar al sitio, los flashes y las grabadoras abandonaron al humano que hablaba ante el micrófono para enfocarse en los animalitos, a quienes siguieron por todo el pasillo hasta la plataforma donde fueron liberados.

El médico Florencio Rivera Castillo, Jefe de Clínica Veterinaria del Zoológico, explicó que tras el nacimiento de los cachorros, personal especializado se dio a la tarea de cuidarlos, alimentándolos al principio con tres o cuatro onzas de leche, cantidades que fueron aumentando en la medida que iban creciendo.

La leoncita y el leoncito sabían que era su festejo, su momento más importante en la corta vida que llevan, pues sus cuidadores les habían contado sobre el fenómeno mediático en que se convirtió Xonotli, su hermano mayor que actualmente tiene 9 meses de edad, pesa 65 kilogramos y come tres kilogramos de carne de pollo al día. Sin duda, Tonatiuh y Metztli, los padres de Xonotli y de la parejita de cachorros, deben sentirse orgullosos por tener a tres hijos sanos, fuertes y, ahora, muy famosos.

El futuro para los tres luce prometedor. Con el Programa de Bienestar Animal del Zoológico del Altiplano de Tlaxcala se espera realizar un intercambio de ejemplares con otros zoológicos para lograr la cruza de los cachorros cuando estén en edad reproductiva y así aumentar el número de los pálidos felinos en el estado.

Con tantos leones blancos ya al cuidado del Gobierno de Tlaxcala, se espera que en el mediano plazo la entidad se convierta, así como ya es santuario de luciérnagas, en el santuario de los leones blancos; para eso se desarrollará un proyecto de construcción de un nuevo albergue acorde con el hábitat de la especie en el que los felinos puedan continuar con su desarrollo.

La fiesta de los cachorros blancos debe terminar. Tampoco es lo mejor que pasen tanto tiempo como verdaderas estrellas de rock luciéndose ante decenas de cámaras. Aún son pequeños y deben descansar. De regreso a su dormitorio. De regreso a la tranquilidad y a los mimos de sus padres humanos adoptivos. De regreso a los últimos días que pasarán en un ambiente humano, pues a partir de este sábado, vivirán en un gran espacio perfectamente adaptado para su exhibición al público, donde continuarán creciendo y fortaleciéndose para cuando llegue el momento en que cada uno de ellos se reproduzca y le siga dando más alegrías a Tlaxcala, el santuario de los leones blancos.