Eso lo dijiste tu, no yo: El juego de tronos baratos
29 de noviembre - 2017

Por Alfredo González

Vaya cruzada la que han emprendido los viejos feudos del magisterio en búsqueda del trono más codiciado del todo la comarca educativa, la cima del escalafón magisterial, la culminación de la cadena de besa manos, lugar codiciado y en algunos casos aborrecido al final por quienes lo han detentado.

Muy pocos, por no decir ninguno o casi ninguno de quienes están al servicio del sindicato mas grande de Latinoamérica, rechazarían un ascenso en su cadena de mandos, el modelo de castas y clases sociales moderno y aún más riguroso que por razones de discriminación llamaron escalafón.

Esa manera de clasificar a la base, como le llaman, se convirtió es una especie de modelo «semi-humanizado» de viejas prácticas que siglos antes derivaron en conflictos bélicos, y que hoy son vistos con apruebo por intereses «políticos» ,por intereses o por el simple hecho de ganar poder y capital humano de su bando.

Ese tipo de acciones que en distintas ocasiones han pervertido desde su esencia la noble labor del mentor no sólo en Tlaxcala, sino todo el país, se presentan en diferentes niveles de la educación pública y privada, sin distingo de culturas, estratos sociales, creencias y claves de plazas magisteriales.

Hablemos de casos hipotéticos que no son tan hipotéticos, platicare el caso de una escuela a la que llamaremos Josefina N., la cual se ubica en un municipio que llamaremos Amaxac de N., por aquello de los que se sienten aludidos.

En este lugar, los refranes y la lógica no tienen cabida, ya que como «casi nunca pasa», a alguna de sus maestras, a quien por lo de las alusiones llamaremos, N. Altamirano, al parecer le resultaba molesta la presencia e indicaciones de su directora en turno, quien trató de aprovecharse de su rango para atreverse a darle órdenes, un Craso error que provocó que la docente, como la historia escrita en marchas al calor de gritos de revolución y sudor de manifestantes, emprendiera una senda de manifestaciones con padres de familia y niños incluidos que pusieron en jaque a la contraparte… la cual finalmente tuvo que empacar en una caja pertenencias e ilusiones para no incomodar la labor de la Che Guevara de Preescolar.

Otro caso de esos que no pasan, pero si pasan y no lo decían, tuvo lugar en un lejano lugar que llaman Huiloac, donde en la primaria que comparte el nombre con un héroe tlaxcalteca, la cima de la cadena de mandos de la institución, el mandamás Netzahuatl, hace valer su palabra a rajatabla, ya sea para colarse en la fila de la cooperativa o supuestamente desaparecer fondos de su caja chica, o lo que es lo mismo, la tesorería de la sociedad de padres, tradición que, como las marchas de normalistas, son infaltables año con año.

Mención aparte

Retomando los abusos y cotos de poder en las escuelas y su gremio, mención aparte merece uno de los que en mi opinión ejemplifican ampliamente el concepto de lo que izquierdosos,

manifestantes, huelguistas, chairos y hasta vagoneros del metro en la CdMx cariñosamente llaman «Charros».

El sujeto en cuestión, tan conocido, comentado y polemizado por cientos, igualmente amado que odiado, o tal vez más una de ellas, es simplemente el inconfundible y añejo «líder de líderes», como dicen que le gustaba ser llamado, el que no le agrada su primer nombre, Don José Pérez, como sus miles de homónimos cuando le quitas su Corona a don Carmen.

Ya en miles sino es que en cientos de miles de ocasiones se ha hablado del yugo que mantuvo al frente de la sección 31 del SNTE, de sus amenazas de descuentos y represalias a la base de no asistir y vitorear sus eventos y marchas, de su control en la zona centro sur del estado donde, como el mismo lo ha dicho: » le ha entrado con buenos y malos», lo que sea para seguir arriba.

Lo que no es concebible, lo que debe quedar en claro a este peculiar señor es que el oportunismo y la manipulación son formas bajas de lograr subir en sus ambiciones… el que maestros, padres de familia y niños sean utilizados para hacer presión o intentar hacerlo con la intención de imponer auténticos «charros sindicales» en puestos clave, no se puede ser juez, parte, verdugo, acusado y Dios.. . Eso ya no es protagonismo, es hedonismo.

El otrora líder buscó simpatías y tras conseguir la aprobación de la ley de uniformes escolares, buscó recibir palmadas en la espalda y alabanzas por hacer su trabajo… Si, como lo leyó usted.. hasta una comida dicen se mandó a hacer por que el diputado finalmente hizo su trabajo… por finalmente desquitar una de sus incontables y jugosas quincenas.

No conforme, el señor de Zacualpan se aventó una nueva puntada que sacó de Home cualquier ocurrencia pasada, pues en vísperas de buscar el respaldo de ciudadanos para conseguir otro puesto que lo mantenga alejado de las aulas, además de sus familiares, o algunos de ellos… propuso que los niños voten y participan en la decisión de asignación del presupuesto del estado en una consulta.

En un principio, la idea parece muy buena, casi se la compro, como muchos más; la participación no sólo de niños sino de los sectores de la población puede aportar mucho a un presupuesto eficiente y equilibrado. Hasta aquí todo bien, hasta que se recuerda quién es el autor de la propuesta.

Llámeme escéptico, pero la idea de que las huestes magisteriales y las inocentes mentes y conciencias de los pequeños como parte medular de la decisión presupuestal no son para nada buena idea… hasta con ver que en manos de los docentes de la 31 están gran parte del más de medio millón de alumnos de niveles de educación básica, pequeños a quienes sin tener conciencia propia de las decisiones en el entorno político se les pretende dar voz y voto en el tema que requiere seriedad y análisis (lo de la conciencia no lo digo yo, sino estudios con fundamento científico).

Creo que Don Carmen ha intentado ver en la niñez un capital político que hasta hace un tiempo, de alguna manera estaba exento de las tentaciones de terruños electorales, que era de «chocolate» para los candidatos, un recurso pasivo que no corrompía el dispendio desmedido y mapachismo, y que hoy en día un diputado quiere mandar al campo de batalla y poner un precio de corrupción muy pero muy bajo.

Se le olvidó que durante lustros, varios años acumuló puestos y huesos en el sindicato, solución de sus problemas personales y no tan personales, candidaturas, todo por negarse a regresar a aquella aula de cuarto año en el sur del estado donde ha estado asignado desde hace décadas, plaza y horas clase que jamás a laborado, niños que nunca ayudó a formar, conocimientos que no compartió, y dinero… cochino dinero y poder, por el que los cambio, brillante como charro, una decepción como mentor…

Con el cucharon

Alguna vez un ex alcalde del blanquiazul me lo dijo: » Para eso es el poder y el dinero… Para usarlo, ejercerlo y hacerlo valer»…y vaya que muchos, pero muchos le han hecho caso a su ideología, sobre todo los que habitan las alturas del Palacio Xicoténcatl en la Gran Tenochtitlan de este nuevo imperio azteca que llamamos México.

Y entre esos pseudo tlatoanis, más de 620 de hecho, hay cientos de vivaces que han incrementado su ambición en medida que pasa el tiempo en su curul, al grado que la cuchara de plata fina que utilizaban para servirse del plato presupuestal les ha quedado corta, pequeña para saciar sus caprichos.. una cuchara que es reemplazada por el cucharon de ambiciosos.

En ese tenor anda una huamantleca que ha pasado por más partidos en los últimos años que el salero en fiesta de pueblo, recorriendo sin empacho alguno los pasillos del PRI buscando cabida, hasta marchas y plantones del PRD,PT, Movimiento Ciudadano y el infaltable MORENA, toda una peregrinación del hueso electoral.

Cuentan por ahí que, aquella mujer que gozaba de la fama por su manera de hacer tamales para las reuniones, estaría convertida ahora en una completa «hacendada», su nueva adquisición, dicen, fue la hacienda de la Noria en los terruños de Terrenate, casco antiguo y nuevo capricho que le habría hecho desembolsar varias decenas de millones para darse un «gustito».

Por si fuera poco, cuenta la leyenda que la diversificación de mercados e ingresos la han apurado a hacerse de nuevas fuentes antes de irse del cargo con sus tiliches y corifeos, tanto así que la adquisición de transportes de carga serían su nuevo objetivo para fines que sólo ella conoce.

¿Tendrán algo que ver todo ello con la enigmática actividad que se vive en aquella casona antigua de Terrenate y los alrededores?, ¿ qué es lo que se transporta y almacena en esos lugares donde se ve tanto movimiento de camiones y camionetas a toda hora del día?, ¿las quesadillas llevan queso o no?, sólo ella y algunos más sabrán una o más respuestas…

Para no variar, una de sus compañeras de cámara, de las que en 2012 se llevaron la venia de tlaxcaltecas para representarnos en la cámara más alta del Parlamento, que también recorrió el viacrucis de partidos yendo de derecha a izquierda y hasta la cocina para buscar también la gubernatura de Tlaxcala, la siempre polémica «Lore», también tomó el cucharon del pozole para servir en su plato su tajada, tajada que llevaba entre el caldo algunas malas hierbas y garrapatas políticas que no se han soltado de la ubre del erario público por años

Y es que más allá de cuánto o qué tanto se llevó a su bolsa, lo preocupante es a quiénes se llevó, y más aún, a quiénes trajo consigo y enquistó como un virus en la sociedad tlaxcalteca.

Con sus ansias de triunfo y necesidades de crear una imagen que manipulara conciencias a sus designios, Doña Cuéllar acarreó dinosaurios de la política, uno que otro despistado y hasta las pulgas, alimañas que encontraron nuevo huésped en el colorido mosaico del asilo en el que se ha convertido el peje-partido.

En los prados de la sucursal de Tabasco en Tlaxcala se cuentan damnificados y perdedores de elecciones pasadas, personajes de cuestionados resultados y otras bellezas a las que sumaron los nuevos Beverly-ricos que se han adueñado poco a poco de todo como moho en casa antigua.

Poco tuvo que pasar para que una escandalosa y protagónica Clara Brugada abandonará una nave que se fue a pique en 2016, lo que se convirtió en un cheque al portador para unos resentidos y derrotados lorenistas que buscaban nuevas pieles de oveja para sus viejos lobos.

Habrá que ver si la extraña combinación de batallas a cuestas, resentidos y empedernidos por el poder trae buenos dividendos a MORENA en 2018, o si nuevamente la senadora se equivocó en llevar a su plato cualquier garnacha que dijo ser fina vianda.