Posterior a su canonización, los santos tlaxcaltecas toman su lugar en la catedral capitalina

Por Alfredo González

Este domingo, posterior a que el Papa Francisco canonizara a los santos tlaxcaltecas, Cristóbal, Antonio y Juan, los “Niños Mártires” de Tlaxcala, fue desvelada una pintura que servirá como objeto de veneración en la catedral de San Francisco en la capital.

Durante una celebración eucarística llevada a cabo con cientos de feligreses, la diócesis de Tlaxcala llevó a cabo la consagración de un altar y la imagen donada por una tlaxcalteca de lo que será la nueva imagen de estos santos.

Posteriormente, una vez que regrese el obispo a Tlaxcala procedente de El Vaticano, donde presenció la canonización, Julio César Salcedo Aquino realizará la bendición de la imagen de estos jóvenes ejemplares de la historia cristiana en Tlaxcala.

En la misa previa a la revelación, fue destacada una y otra vez la importancia de la canonización de estos tres personajes que adoptaron como suya la idea de la evangelización y que forman ahora parte de los pilares de la fe católica en la entidad.

Durante la madrugada y al tiempo en que en Roma se daba a conocer la determinación, la fiesta invadió diversos puntos de la entidad, donde diversas parroquias realizaron festejos por la canonización que reunieron a cientos en lugares como Chiautempan, Tizatlán y Atlihuetzia, de donde tan originarían los tres santos.