Papá millennial
19 de junio - 2017

Por Ranulfo rojas Bretón

Si ser papá es una tarea exigente, imagino que ser papá en este tiempo llamado “millennial” lo debe ser más. El papá de un millennial, es fruto de la llamada generación “X” la generación que fue fruto de la generación de los años 70s y 80s. Generación que le tocó la primera época de “contestación” en la que los hombres se dejaron el cabello largo, utilizaron ropa “psicodélica”, pantalones y camisas de colores, impusieron la moda “hippie”, las mujeres comenzaron a utilizar pantalones y con ello la llamada “revolución femenina”. Reaccionaban contra el mundo adulto, contra las formas de autoridad y se armaron manifestaciones contra la guerra en Vietnam, la famosa “Primavera de Praga”. Aquí en México fue célebre el movimiento del 68 de donde pasó la trágica matanza de estudiantes y lo vivido en el 72 en la fiesta de Corpus Christi con el halconazo.

Toda esa actitud vivida en esas décadas dio origen a una formación de reacción contra todo lo establecido en la sociedad, contra la política y también contra la religión. Los padres de la generación de los 70 y 80 dejaron que sus hijos tuviesen más espacios de libertad. Que ellos decidieran cosas y la intervención en los procesos formativos y educativos era muy limitada. La idea era: que los hijos no sufrieran las imposiciones que a ellos se les quisieron imponer en sus casas, en la escuela y en la sociedad. A esa generación se le llamó la generación “X” y se trata de los niños que fueron jóvenes en la década de los 90 y 2000. A esta generación X le tocó vivir acontecimientos como la caída de Muro de Berlín y la reunificación de las Alemanias, el final de la guerra fría y la caída del régimen socialista de la llamada URSS.

Este tiempo fue llamado posmodernidad y tenía como características sociales ser una generación de personas X es decir, sin definiciones ideológicas, más de la cultura de lo light, de lo fast, de lo cool, de lo úsese y tírese, es de un tipo de personalidad poco comprometido. No era la generación de los jóvenes radicales de los 80s, sino de una actitud permisiva y relajada.

Esta generación ahora es papá en una generación millennial, de los niños adolescentes y jóvenes ligados a la tecnología, a la cultura de lo sedentario, de la incomunicación interpersonal, cultura más ligada a lo emocional y por ello muy vulnerable; se trata de una cultura cuyo valor es la tecnología y las redes sociales, los tutoriales y las aplicaciones. Gustan de tener todo, porque los papás siempre se los han dado, y no les ha costado tenerlo. Son tiempos del: si no te gusta no te lo comas; si no te sientes bien, no lo hagas; si te molesta retírate; es una cultura de poca exigencia y nulo sacrificio; cultura del todo se puede, todo se vale, todo se permite y lo peor es la idea de que todo se lo merecen.

Obviamente, como en la realidad ni todo se puede, ni todo te lo mereces, los hijos de este tiempo sufren y entran en depresión que en muchos casos los lleva al suicidio.

A hijos de este tiempo los papás tienen que acompañarlos y tratar de ser guía y modelo, de ahí el gran reto para un padre de un hijo millennial de intentar ser un buen padre con las armas limitadas que tiene.