16 de noviembre - 2016
Parece regresar la calma entre Adolfo y Anabell, en busca de una transición tersa y civilizada. En el caso del resto de los alcaldes electos del PRD y PAN están más estresados en sus pugnas internas, que por cómo recibirán. Y aún se ignora cómo quedarán las percepciones mensuales de los diputados electos, serán menos y con mayor presupuesto
Por Edgardo Cabrera
En la capital del estado parece que regresa la calma entre el gobierno del panista Adolfo Escobar y la administración electa que encabeza la priísta Anabell Ávalos.
Al menos ese es el mensaje que trataron de enviar desde la oficina de comunicación del alcalde saliente que ayer difundió un boletín y fotografía del primer encuentro formal de cara a la transición.
Si bien no han existido fricciones, lo cierto es que el escándalo por la disputa de la propiedad de la alberca municipal denominada pomposamente “Polideportivo Carlos Castillo Peraza”, abrió una brecha entre ambos.
Fue evidente que la presidenta municipal electa se mantuvo distante de los reflectores, así como de cualquier tipo de reunión informal con Escobar para no generar falsas expectativas con ninguna de las partes de este asunto que no conoce a fondo.
El tema es que si bien es un problema que le heredará el panista, Ávalos Zempoalteca difícilmente puede opinar sin conocer el abultado expediente derivado de los procesos legales promovidos por 4 particulares que se dicen dueños del predio, amén de que está obligada a revisar la estrategia jurídica emprendida por el gobierno municipal.
Por lo pronto y dado que se acortan los tiempos del relevo, ayer la priísta y el panista establecieron un calendario de reuniones entre ambos equipos para comenzar a revisar no sólo el tema de la alberca municipal, sino la larga lista de pendientes que recibirá.
La próxima semana los equipos de transición sostendrán su primera de varias reuniones, las cuales se prevén que no paren hasta que se encuentre caminando la próxima administración.
Ejemplo
A colación del encuentro Anabell-Adolfo, los 2 ponen el ejemplo al resto de las administraciones municipales que a la fecha no han iniciado trabajos formales para el relevo.
En algunos casos son claras las diferencias políticas o, como en el caso del PRD, los electos están más estresados en sus pugnas internas para nombrar al coordinador de alcaldes, o los panistas por la disputa de la dirigencia estatal, que por la condición en cómo recibirán las administraciones.
Lo cierto es que en su mayoría pierden de vista que tal y como arranquen así terminarán, de no cuidar el proceso de entrega-recepción e incluso de solapar los cochineros que les dejarán en algunos casos, se anticipan 4.8 años de dolores de cabeza.
Entre menos….
Por cierto que en el caso de los legisladores locales que están por entrar en funciones aún se ignora cómo quedarán sus percepciones mensuales ya que apenas iniciará la discusión del paquete presupuestal.
No perdamos de vista que de las 32 curules que existían, a partir de enero sólo estarán 25, de acuerdo con la reforma constitucional que redujo el número de miembros que conforman la legislatura local.
Será interesante saber qué pasará con sus dietas considerando que el presupuesto no se reducirá pese a la disminución de diputados, por el contrario, sabemos que en el anteproyecto se estima un incremento, además de que se plantearía conservar el mismo recurso para dietas pero distribuido entre menos diputados, lo que invariablemente significará un alza.
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