Los levantadedos alistan rasurar la agenda legislativa, se sabe que lo que realmente les ocupa son negociar las cuentas públicas de los primeros 9 meses de este año. Tomemos nota de la civilidad de los norteamericanos, pese a la encarnizada lucha electoral, los perdedores admitieron la derrota y desearon éxito al triunfador: toc, toc, le podrían decir a Lore

Por Edgardo Cabrera

Cuando falta medio centenar de días para que dejen la curul, los levantadedos que despachan en Allende 31 alistan rasurar la agenda legislativa programada para su segundo y último periodo de sesiones, serán extirpados algo así como 65 temas.

Admitieron que no les dará tiempo de agotar todos los temas enlistados , ¿pues cómo?, si cuando no andan de viaje se van a los toros a brindar y a tirar rostro como el perredista Calyecac.

Los salientes se han caracterizado por suspender, empezar con retraso y chacotear en las sesiones ordinarias, de ahí que no resulta raro que hereden una larga lista de pendientes.

Se sabe que lo que realmente les quita el sueño en la recta final de su gestión son las negociaciones por las cuentas públicas de los primeros 9 meses de este año que deberán dictaminar a más tardar el 15 de diciembre.

Trasciende que, al igual que ocurrió semanas atrás, algunos levantadedos pretenden excluir a la Comisión de Finanzas y Fiscalización, así como al OFS, para “planchar” los dictámenes que se presentarán al Pleno, sin importar si existe o no malversación de recursos.

Otros más, nos enteramos, con el pretexto de la aprobación del paquete presupuestal del 2017, lo mismo buscan acercamientos con el gobernador que con los alcaldes electos para –según ellos- interceder para apuntalar sus planes y proyectos de gobierno, ¡vaya descaro!

Mesurados

Tras el triunfo de Donald Trump en Estados Unidos, tanto el gobernador constitucional como el electo, Mariano González y Marco Mena, respectivamente, llamaron a la calma a los tlaxcaltecas.

El asunto es que, de la noche a la mañana, surgieron los “iluminados” y profetas, personajes que con tal de obtener reflectores lo mismo se sueñan economistas que internacionalistas, ahí está por ejemplo el presidente de la CMIC que pintó un panorama aterrador para los empresarios locales por la llegada del magnate a la presidencia del vecino país.

Mariano nada más recordó que con Barack Obama fueron deportados más de 2 millones de migrantes, mientras que Hillary Clinton también habló de un muro fronterizo, el que por cierto ya existe en buena parte de la franja fronteriza.

En tanto que Marco pidió actuar con inteligencia, tacto y unidad, al tiempo de que ofreció que su gobierno será aliado incondicional de lo migrantes tlaxcaltecas y sus familias.

Cada vez son más los analistas que coinciden en mantener la calma, evitar las especulaciones, prepararse y esperar al arranque del gobierno de Trump, al tiempo de que admiten que nada garantizaba que Hillary Clinton flexibilizara la política migratoria o que mantuviera –tal y como funciona a la fecha- la relación comercial con nuestro país.

También la sugerencia es apretarse el cinturón y mantener presupuestos austeros, algo de lo que deberían tomar en cuenta algunos como la presidenta del ITE o el rector de la UAT que han planteado incrementos exagerados de recursos para el 2017.

Mientras tanto, y dado que estamos en plena efervescencia por lo que pasó en EU, hay que tomar nota de la civilidad con la que se conducen los norteamericanos; pese a la despiadada y encarnizada lucha electoral, tanto la ex candidata perdedora como el actual mandatario de esa nación admitieron la derrota de su partido y desearon éxito al triunfador.

En Tlaxcala, ya vimos, hay perdedoras que se niegan a aceptar su derrota a pesar de que en las urnas y en la mesa (vía impugnaciones) no fueron capaces de ganar, por el contrario quieren que les vaya mal a las autoridades electas para lo cual ya alistan piedras en el camino, aunque ello afecte a la población.

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