Sin pena ni gloria
7 de noviembre - 2016

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Algunos funcionarios de la administración de Mariano pasarán a la historia sin pena ni gloria, tal es el caso de Minerva. En eso de los perfiles para el próximo gabinete, el sector de la seguridad y procuración de justicia será un reto mayúsculo. Aunque varios se frotan las manos, nadie tiene puesto asegurado, incluidos algunos diputados

Por Edgardo Cabrera

Algunos funcionarios de la administración de Mariano González Zarur pasarán a la historia sin pena ni gloria, tal es el caso de Minerva Reyes Bello que aunque se mantuvo al frente del IDET en todo el sexenio, no quiere decir que tuviera un buen desempeño, más bien su permanencia fue producto de una cuota política.

Recordemos que la señora ocupó la titularidad del deporte de Tlaxcala gracias a su esposo, el ex alcalde perredista de Zacatelco Felipe Sánchez Lima.

El respaldo del también ex diputado local al entonces candidato del PRI a la gubernatura fue pagado con la titularidad del IDET para su esposa, acuerdo que no fue roto pese a las constantes críticas al desempeño de la señora Reyes Bello quien lo mismo se caracterizó por impuntual a las reuniones de gabinete que por sus magros resultados en materia del deporte.

Para muestra un ejemplo reciente (de los muchos que hubo en el sexenio), el IDET y su titular fueron excluidos de la primera Vuelta Ciclista de Tlaxcala que organizó la Oficialía Mayor y el ex pedalista profesional Julio Alberto Pérez Cuapio.

Pese a ser la titular del deporte del estado, Minerva no fue requerida ni para el banderazo de salida, ni para la premiación de los ganadores, en contraste, el gobernador Mariano González Zarur sí estuvo presente.

Si bien la carrera enfrentó algunos problemas de logística, entendibles por su primera edición, tuvo un éxito rotundo con la participación de 216 competidores nacionales y extranjeros, así como por la bolsa de más de 600 mil pesos que se entregaron en premios.

Ahora cuando se acerca el fin del sexenio y la entrada de la nueva administración que encabezará Marco Mena, lo mejor que le podría pasar al deporte de Tlaxcala es que no exista continuidad en la titularidad de dicho instituto.

A colación  

En eso de la revisión de los perfiles para el próximo gabinete estatal, algo que desde hace semanas realiza el gobernador electo y que mantiene como secreto de estado, el sector de la seguridad y procuración de justicia será un reto mayúsculo para colocar a las mejores propuestas.

Tras los últimos acontecimientos en materia de delincuencia, es evidente que ninguno de los que conforman el gabinete de seguridad pueden repetir, debe existir una limpia

Aunque a muchos no guste, lo cierto es que el pensamiento aldeano debe ser superado y no descartar a especialistas ajenos a Tlaxcala para frenar el “amiguismo”.

Dicen

Y aunque muchos se frotan las manos pensando en la continuidad, lo cierto es que nadie del gabinete de González Zarur tiene su puesto asegurado.

Por lo anterior es que Marco Mena ha preferido mantenerse de bajo perfil para evitar generar falsas expectativas con quienes -al principio del sexenio- fueron sus compañeros de gabinete.

Lo mismo ocurre con sus ex compañeros de legislatura, varios aseguran que estarán en la próxima administración, pero lo cierto es que algunos se llevarán una desagradable sorpresa, a la hora de la hora.

Los aficionados al rumor aseguran que después del último informe de Mariano González, previsto para el 5 de diciembre, empezarán a darse señales más claras de quiénes ocuparán las dependencias estatales, en lo particular dudamos de esos chismes, los nombres podrían ser develados lo mismo un día antes de su toma de protesta que luego de asumir funciones.

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