Por Gerardo E. Orta Aguilar

Integrantes del Consejo Agrario Permanente (CAP) en Tlaxcala, anunciaron severas afectaciones para el campo tras el nuevo “gasolinazo” que se aplica a partir de este lunes en todo el país, y que motivará complicaciones para solventar las necesidades del sector.

De acuerdo a José Isabel Juárez Torres, la gente del campo se encuentra cada vez más asediada por el gobierno federal, pues al tiempo en que se registran incrementos en diversos productos e insumos, los salarios se mantienen en niveles bajos.

Sostuvo que en artículos como fertilizantes, plaguicidas, y diésel, el nuevo incremento impactará de forma negativa, con lo que se reducirán las inversiones que realicen los campesinos tlaxcaltecas.

Anteriormente, un campesino gastaba hasta dos mil pesos para mantener una unidad agropecuaria con diésel, y se estima que ese gasto reducirá hasta en un cuatro por ciento.

Lamentaron que ni a nivel federal ni estatal, se hayan observado apoyos para el campo, lo que ha motivado la quiebra de un amplio número de campesinos en Tlaxcala, situación que se ve agravada con el encarecimiento y exportación de maíz.

Pese a ello, confiaron en que este ciclo agrícola sea favorable para los campesinos tlaxcaltecas, pues los adheridos al CAP tienen la previsión de 240 mil hectáreas de cultivos, entre ellos, maíz, cebada y trigo.

Sobre el último, los productores del campo advirtieron que a las complicaciones económicas se sumará la presencia de la plaga de roya, que ha afectado a los cultivos en Tlaxcala.

Para la compra de fungicidas, los campesinos tienen que erogar mil 200 pesos para mitigar los efectos de esa plaga.