¿Corrupción? ¿A dónde?
27 de julio - 2016

mauricio_olaiz

Por Mauricio Olaiz 

Apenas promulgado el fabuloso sistema nacional anticorrupción la semana pasada, los hechos nos dicen claramente que tan solo será autentica letra muerta.

Para empezar durante su presentación el Presidente pidió perdón por la “casa Blanca” pero de inmediato continuó con el acoso sobre aquellos que le descubrieron el acto corrupto, por otro lado, los partidos se echan lodo unos a otros, mostrándonos que en todos los colores hay podredumbre corrupta, ya no es una cuestión de partidos sino de iguales idiosincrasias, en donde el arte de vivir del erario y transar para avanzar es el apartado primero de sus reglamentos internos.

Combatir la corrupción en México es en verdad una tarea titánica a la que nadie le quiere entrar, es mera simulación para acallar a un sector social que ha mostrado inconformidad y pide una verdadera reforma de estado. Pero los actos corruptos se siguen sumando, documentando, especialmente entre los gobernadores que están por dejar el poder en sus estados, incluyendo nuestro querido contable.

Pero esta semana los que se llevan las palmas, la ovación del respetable en eso de la nula transparencia, la opacidad, con su consabido sospechosismo son los diputados integrantes de la Comisión de Finanzas y los alcaldes de cada municipio de este pequeño pero corrupto estado, esos prestidigitadores de las cuentas, artífices del ilusionismo fiscal primero anunciaron con bombo y platillo que las audiencias con los ediles para la revisión de la cuenta pública 2015 serían abiertas, luego se desdijeron y echaron a la prensa y se encerraron a piedra y lodo, ante los berrinches de una dizque legisladora con apellido de origen polaco y con la complicidad del presidente de la comisión Roberto Zamora.

En solo unos días nuestros eficientes diputados de la comisión revisaron toda la cuenta pública 2015 del estado, eso es eficiencia señores y no otra cosa, se entrevistaron con cada uno de los munícipes y todos salieron de las reuniones con una sonrisa y con la tranquilidad del acuerdo alcanzado, del pacto logrado para ajustar las cuentas, todo en orden y venga la del 2016, solo que ese “bisne” es ya para la nueva legislatura, esa que va a durar solo año y medio por lo que se deberán aplicar los flamantes nuevos diputados, pero de ese nuevo line up legislativo les hablaremos más adelante.

Lo peor de todo es que los miembros de la comisión fueron evidenciados por la prensa, un día sí y otro también, sobre sus prácticas ocultistas y ninguno siquiera se despeinó; en especial Zamora con su melena aleonada, cero preocupaciones, impunes del acto sabedores que a la sociedad no le importa, por ello abandonan el congreso con aires heroicos como si en verdad asistieran al progreso de su estado, ni siquiera ocupados, mucho menos preocupados, por el nuevo mamotreto llamado sistema nacional anticorrupción.

¿Quién denuncia a los corruptos? El favorecido por haberse robado hasta el desagüe, lo que le permite pasar de carpintero a empresario mueblero, o quien le ayuda haciendo como que revisa un Excel con las cuentas públicas llena de dibujos de patitos y barquitos, donde las cifras no cuadran y ni fórmulas tienen, ¿neta todos pasaron?.

Diría Peña Nieto, es una cuestión cultural esto de la corrupción, pero al bloquear el 3 de 3 será imposible saber cuántos ediles pasan a ser millonarios, porque cuando quieran ser diputados no tendrán que presentar sus declaraciones gracias a sus pares legisladores federales, es el juego del poder al cual no todos se pueden subir, a menos que hayan hecho dinero…del erario.