Por Fernando Tamayo

La visita el pasado domingo del recientemente nombrado Dirigente Nacional del Partido Revolucionario Institucional Manlio Fabio Beltrones a nuestra Entidad, constituyó una muestra de la forma en que el reconocido político mexicano ejercerá el poder como responsable nacional del PRI.

Lo ocurrido en el Palenque del recinto ferial tlaxcalteca estuvo, como en antaño, plagado de elementos propios del antiguo régimen mexicano que marcaron la hegemonía priista durante el siglo veinte y que tienen relación con el juego de señas y señales que permite vislumbrar lo que la clase política tricolor tiene destinado para nuestro Estado.

Durante su discurso, el Presidente del Comité Ejecutivo Nacional dejó entrever un par de cosas que serán fundamentales para el priismo rumbo a las elecciones de 2016. En primera instancia debemos señalar que Manlio Fabio evidenció su relación de respeto, y principalmente de amistad, con el Gobernador del Estado Mariano González a quien no perdió la oportunidad de reconocer -según dijo- su buen trabajo como titular del Ejecutivo Local, por lo que sentenció que así como obtuvieron el triunfo en las pasadas elecciones habrán de hacer lo mismo en 2016 para dar continuidad a la labor realizada por el apizaquense.

Asimismo el ex Gobernador de Sonora no sólo se dio el tiempo para enaltecer la labor realizada por el Gobernador tlaxcalteca sino además para dejar en claro que la opinión de éste último será fundamental para elegir al candidato que permita al PRI mantener el control político del Estado.

Tal vez por ello el Gobernador y primer priista de Tlaxcala en el momento de su intervención fue tajante al referir que en su partido existen reglas, las cuales deben respetarse, recordando aquel dicho propio del antiguo régimen que advertía que “aquel que se mueve no sale en la foto”.

Tras la culminación del evento tres cosas quedaron de manifiesto. 1) Manlio Fabio Beltrones, fiel a su estilo, no dejará bajo ninguna circunstancia que durante su gestión el tricolor pierda alguna elección. 2) El Gobernador actual será pieza fundamental para decidir quién puede ser el delfín priista que tenga como tarea conservar el Gobierno Estatal. 3) Aquel que se mueva antes de los tiempos marcados por las costumbres de dicho partido difícilmente logrará alcanzar la candidatura.

Finalmente, y aunque no se expresó de manera directa, el primer evento público de Manlio Fabio Beltrones como Dirigente Nacional del PRI permitió vislumbrar que en la carrera hacia la obtención de la candidatura priista el que hoy se encuentra adelante es el recientemente nombrado Dirigente Estatal tricolor, Marco Antonio Mena Rodríguez. Lo anterior tomando en consideración ese viejo juego de entender entre líneas que durante el siglo pasado permitió al Revolucionario Institucional controlar la totalidad del Sistema Político Mexicano que hoy parece resurgir con nuevos bríos. Al tiempo.

Desde la barrera

Se anunció por parte del INE que tanto el Partido Humanista como el Partido del Trabajo perderán su registro, acción que nos obliga a preguntarnos si en la joven democracia mexicana resulta necesario contar con tantos institutos políticos cuyo costo es sumamente alto.

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