29 de abril - 2015
Tlaxcala| Gerardo Orta.- Únicamente el dos por ciento de los migrantes que llegan al albergue La sagrada familia en el municipio de Apizaco, denuncian vejaciones o violaciones a sus derechos humanos en su paso por Tlaxcala.
El resto de los migrantes, es decir, más del 90 por ciento deciden continuar su camino debido al temor de ser deportados por las autoridades migratorias del orden federal con presencia en el estado.
Carla Patricia Juárez Peña, coordinadora al interior del albergue, señaló que la mayor cantidad de quejas que presentan los migrantes centroamericanos tienen que ver con robos, extorsiones, amenazas con armas de fuego o golpes de autoridades o bandas delictivas al sur del país.
De hecho, el 95 por ciento de los migrantes que llegan al municipio de Apizaco denuncian que fueron víctimas de algún delito en su paso por la frontera sur del país.
En el albergue para migrantes de Apizaco se orienta a las personas sudamericanas principalmente sobre sus derechos humanos, y las instancias a las que pueden acudir ante cualquier situación de violencia, discriminación, o extorsión.