Mtro. José Antonio Aquiahuatl Sánchez

Agradezco nuevamente, el estar en contacto directo con usted, que me está leyendo, le comparto que hace unos días, me preguntaba un abogado de experiencia en materia penal del sistema tradicional, ¿oye amigo, es cierto que si no me capacito en el nuevo sistema de justicia penal, mi vida de abogado en esa materia ya no tiene futuro?

De entrada, le soy sincero, dudé en darle la respuesta a este abogado que representa un buen número de casos ganados en el sistema penal tradicional, resultaba difícil decirle que en mi consideración, si estaría terminada su labor de litigante en esa materia penal, ya que los argumentos y formas de defender un asunto, no importando que interés defiendas, (víctima o imputado), son diferentes en forma y fondo de lo que ahora en audiencias se resuelve por los jueces.

Por ello la capacitación y prácticas de litigación, así como el entendimiento y comprensión del objeto y fin de cada audiencia resultan primordiales, para transmitir habilidades que han sido generadas en diversas experiencias en Latinoamérica y Entidades federativas, así como corregir algunos defectos que han sido detectados a lo largo del proceso de implementación desde el 2008 a la fecha, dando seguimiento de audiencias observadas sistemáticamente por los operadores en diversas entidades federativas donde se ha visto las “malas prácticas” de la implementación de la reforma Procesal Penal a nivel nacional.

La reforma procesal penal implementada en México a partir de junio de 2008 trajo cambios sustanciales al sistema de enjuiciamiento criminal. Actualmente, parece completamente instalada la idea del juicio oral como forma de juzgamiento y pese a los inconvenientes que se siguen atravesando para la producción de los juicios, en principio podríamos afirmar que la reforma está ya consolidada.

Una de las grandes promesas con las que se encaró este proceso, fue la de disminuir al mínimo posible la retardación de justicia, realizando procedimientos rápidos y efectivos donde la víctima tuviera una verdadera respuesta de parte del Estado y el imputado de la comisión de un delito recibiera su sentencia en la forma más clara y transparente posible.

Por ello, el Nuevo Código Nacional de Procedimientos Penales, adoptó un régimen acorde con los instrumentos internacionales de derechos humanos, donde la prisión preventiva disminuyó en su aplicación, pero en la actualidad enfrentamos una litigación Heterogénea en criterios, objeto y fin de cada audiencia, por ello la necesidad de reflexionar nuevos ámbitos de debate, ya que creemos superadas varias discusiones de principios y fundamento tanto por la legislación como por la jurisprudencia generada alrededor del tema.

Por ello, si la oralidad fue uno de los pilares de la reforma, consideramos que el debate necesario en nuestra realidad procesal se traslada desde el plano teórico de principios y fundamentos hacia las prácticas concretas de litigación estratégica de los asuntos que conocemos, aplicando el conocimiento y profesionalismo.

Concluyo diciendo que la litigación estratégica, la oralidad efectiva se ejerce: estudiando, leyendo, presenciando y practicando, jamás podremos adquirir y desarrollar habilidades y competencias a partir de conocimientos empíricos o viendo infinidad de audiencias en materia penal.

Me despido de Usted y los invito a los talleres de simulación de audiencias preliminares, intermedia y juicio oral, que se llevara a cabo del 6 al 9 de abril en Tlaxcala, informes e inscripciones en nuestras páginas o al correo Ivonne_ley@live.com.mx

Facebook JOSÉ ANTONIO AQUIAHUATL SÁNCHEZ Y JUICIOS ORALES TLAXCALA.

TWITTER: @aquiahuatl_san

Docente certificado por evaluación de la secretaría técnica para la implementación del sistema de justicia penal en México.