Tlaxcala| José Luis Ahuactzin.- En un operativo conjunto la Profepa, Cofepris y Conagua clausuraron a 7 empresas de los estados de Puebla y Tlaxcala, siendo 2 las instaladas en la zona sur de la entidad.

Después de varios años de denuncias a las empresas contaminantes por activistas, el operativo arrojó que las empresas de Tlaxcala fueran clausuradas porque los niveles de descarga de agua están fuera de los límites máximos permitidos, el título de concesión para la descarga de aguas residuales no está vigente, no presentaron aviso de funcionamiento, no presentaron plan de manejo de residuos peligrosos y por la falta de equipo de protección personal, en los trabajadores laboralmente expuestos.

Durante las vistas de inspección no exhibieron pruebas de corrosividad, reactividad, explosividad, toxicidad, inflamabilidad y biológico-infecciosas por laboratorios acreditados y aprobados; tampoco cuentan con un almacén de residuos peligrosos o exceder su capacidad.

Aunque la dependencia federal no precisa los nombres de las empresas clausuradas, informa que fueron verificadas las factorías como Tecnoacabados Zaldo, S.A. de C.V., Plami, S.A. de C.V., Costuras y Manufacturas de Tlaxcala S. de R.L. de C.V., Celulosa de Fibras Mexicanas, S.A. de C.V., Telas del Continente, S.A. de C.V., y Síntesis Orgánicas, S.A. de C.V., todas localizadas en el territorio estatal y aledañas al afluente.

De acuerdo con la investigación, entre Puebla y Tlaxcala suman 31 municipios donde existen empresas contaminantes.

Estas empresas en conjunto, vierten al Río Atoyac 62.8 toneladas al día de sólidos suspendidos totales; 14.7 toneladas al día de nutrientes, 0.14 toneladas al día de metales pesados como es Plomo, Cromo, Cadmio, Cobre, Mercurio, Níquel y Zinc; así como 0.09 toneladas al día de compuestos orgánicos tóxicos.

Derivado de estos químicos, la Cofepris, presume que por ello es el incremento de enfermedades y riesgos a la salud.