¿Tlaxcala cultural?
14 de octubre - 2014

fernando_tamayo

Por Fernando Tamayo

Octubre se ha vuelto, para una parte de las administraciones municipales, el mes dedicado a la cultura y a la presentación de «espectáculos» y eventos tendientes a fomemtar la «cultura» entre los ciudadanos.

Sin embargo y muy a pesar de aquellos que verdaderamente dedican su vida a la cultura y las artes, las acciones que los munícipes interpretan como culturales, tienen que ver más con actos populistas que con políticas públicas serias tendientes a desarrollar culturalmente a los tlaxcaltecas.

Tanto el Festival Cultural Capitalino que celebra la fundación de la Ciudad de Tlaxcala como el propio del municipio apizaquense constituyen un buen intento por acercar la cultura a la sociedad, sin embargo, se quedan cortos dado que el contenido y la duración de los mismos es, por decirlo de alguna manera, precario.

La cultura dada la crisis que viven las instituciones públicas y el llamado tejido social en el país y la entidad es un elemento primordial para el desarrollo colectivo, sobre todo, si tomamos en cuenta que el aspecto cultural permite contar con sociedades mayor y mejormente educadas que conviven en un ambiente de civismo y respeto a las normas colectivas.

Hoy, el tema cultural no debe ser la justificación para enaltecer la figura personalísima de las autoridades municipales, por el contrario, debe formar parte estructural en los programas de gobierno locales que tengan como objetivo acercar a los ciudadanos con sus autoridades y permitir un desarrollo mas integral de la sociedad.

Dedicar únicamente unos cuantos días al fomento de la «cultura» en distintas comunidades constituye una indiferencia hacia el desarrollo de uno de los aspectos más importantes del ser humano.

No olvidemos que las sociedades con mayor cultura son aquellas que alcanzan un mejor crecimiento colectivo. Esperemos que pronto las autoridades entiendan que el aspecto cultural no se circunscribe a la generación de algunos conciertos en el mes de octubre, sino que debe sembrarse a diario para construir, desde ese rubro, un entorno positivo para los tlaxcaltecas. Al tiempo.

Desde la barrera

En el aspecto cultural, los apizaquenses se encuentran con varias interrogantes, particularmente, con las que tienen que ver con la conclusión de lo que en algún momento fue presentado como la Casa de Música del municipio rielero. Esperemos que ahora que se encuentra próxima la aprobación de la Cuenta Pública de la anterior administración, los diputados locales, puedan explicar a los habitantes de Apizaco qué pasará con la culminación de dicha obra.