7 de octubre - 2014
Por Fernando Tamayo
Cuando Santiago Creel, en su época como Secretario de Estado en aquel célebre gabinete del Presidente Vicente Fox, acuño el término “sospechisismo” jamás imagino que estaba dando pauta a uno de los conceptos que más han servido para definir ciertas actitudes existentes en la clase política del México contemporáneo.
Y es que a pesar de que el Diccionario de la Real Academia de la Lengua Española no contempla esta expresión, lo cierto es que la misma se aplica de manera inmejorable al entorno que envuelve a la actual Legislatura. Es el sentimiento que priva al interior de una de sus Comisiones más importantes; la de Finanzas y Fiscalización.
Dicho cuerpo colegiado tiene entre otras responsabilidades las de validar los estados financieros de 106 entes fiscalizables, entre los cuales resaltan los de los 60 ayuntamientos que para este año corresponden a los ex Alcaldes, muchos de los cuales han alzado la mano para poder ser contemplados como candidatos a Diputados Federales en los próximos comicios de 2015.
Frente a esta circunstancia, la Comisión de Finanzas y Fiscalización tiene la mirada no sólo de sus homólogos que no forman parte de la misma, sino además, de la mayoría de ciudadanos quienes reclaman que el proceso de rendición de cuentas les permita exigir a aquellos que no entregaron buenas de las mismas a pagar por los daños ocasionados a las arcas municipales.
Así, y tal y como lo avizoramos, semanas atrás en este mismo espacio, el proceso para la dictaminación de las Cuentas Públicas se ha tornado poco aseado dada la serie de suspicacias que han originado las actitudes de los legisladores.
De esta forma, y tras restarles poco menos de 30 días para cumplir con el plazo para la validación de los distintos estados financieros, gran parte de los Diputados Locales han puesto en entredicho el proceder de la Comisión de Finanzas, al grado tal, que se ha producido desconfianza dudando de la legitimidad de los dictámenes provenientes de la misma.
Máxime cuando distintos medios de comunicación, entre ellos gentetlx, han logrado tener acceso al contenido de los Informes de Resultados emanados del Órgano de Fiscalización Superior, ente que en teoría es el capacitado, técnica y legalmente, para señalar los elementos debidamente fundados y motivados por los cuales determinada Cuenta Pública debe o no ser aprobada por el pleno del Congreso, los cuales no corresponden con el parecer de la citada Comisión, sino que al día de hoy conozcamos cuál es la causa de dicha contradicción.
En ese sentido, y en pleno inicio del proceso electoral federal, la LXI Legislatura se encuentra inmersa en una disyuntiva. Tomar como elemento primordial la información contenida en los Informes remitidos por el OFS a la Comisión de Finanzas para poder emitir su voto o bien realizarlo observando únicamente lo señalado verbalmente por la señalada Comisión. Esperemos por el bien de la rendición de cuentas tlaxcalteca, los 32 integrantes de la legislatura entiendan que por encima de las subjetividades particulares se encuentra el interés mayoritario de una sociedad ávida de resultados en el ámbito político. Al tiempo.
Desde la barrera
Lamentable resultó lo ocurrido en Iguala con la desaparición de 43 normalistas, dentro de los cuales se encontraba un huamantleco. La crisis que vive el Estado mexicano y sus instituciones deviene fundamentalmente de la impunidad que impera en nuestra nación. Desde aquí nuestra solidaridad con la familia de César Manuel González Hernández. Esperemos que por el bien de México pronto se esclarezca su paradero y los hechos que motivaron su desaparición y la de sus compañeros.
www.miradasdetalante.blogspot.com
twitter.com/fernandotmy
