El adiós 
18 de junio - 2014

Uno de mis corresponsales me dio a conocer que en octubre Rafael Ortega culminará la gira del adiós en su natal Apizaco; como torero en retiro, nos adelantan que se mantendrá dentro de la grilla. El alcalde de Huactzinco y su novia deberán asumir las consecuencias, dado que están dispuestos a mezclar su vida personal con su labor pública

Mr. Tlx

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Rafael Ortega sin lugar a dudas es el torero que más triunfos le ha dado a Tlaxcala en la fiesta brava.

Lejos de apasionamientos, basta revisar su récord en el número de corridas, sus presentaciones exitosas en la Plaza México (la más importante del país), los galardones obtenidos y su intachable conducta en la tauromaquia.

Lo anterior viene a colación porque uno de mis corresponsales me dio a conocer que el próximo 12 de octubre culminará su gira del adiós en su natal Apizaco.

Con 44 años de edad, el apizaquense decidió el año pasado –previo a su campaña en busca de la alcaldía de Apizaco- retirarse de los ruedos y dedicarse así la política.

Si bien, no me considero amante de la fiesta brava, por tanto no concibo las corridas de toros como mi opción de entretenimiento, tampoco soy anti taurino y reconozco en las personas que se dedican a esta actividad gran valor y condición física para lidiar un animal que supera en volumen, fuerza y bravura a cualquier ser humano.

Desde el año de 1987 Rafael Ortega incursionó como novillero y en 1990 tomó la alternativa en Puebla cultivando así una larga carrera que le ha permitido entre 2013 y 2014 cosechar elogios en su retiro.

Otro de mis corresponsales me adelanta que el domingo se publicará en Gentetlx una entrevista a cargo de Gerardo Orta en la que el matador dará detalles de su retiro.

Sabemos que antes de octubre se presentará en Tetla -donde será reinaugurada la plaza de toros de ese municipio el 27 de julio- y días antes toreará también en Hidalgo.

Como torero en retiro, nos adelantan que se mantendrá dentro de la grilla, aunque todavía no sabemos qué futuro podrá tener, sin embargo el segundo lugar logrado en Apizaco lo convierte en un atractivo para los institutos políticos.

También, me cuenta mi corresponsal, que con cuatro décadas de vida, Ortega considera que nunca es tarde para prepararse por lo que se encuentra cursando una licenciatura en administración de empresas, ¡enhorabuena!

Y en otro tema, ahora sí una noticia de mis corresponsales me arrancó una enorme carcajada tras descubrir que las instalaciones de una alcaldía se convirtió en un enorme “chismográfo” –eso existía en mis tiempos, ahora evolucionó a Facebook-.

Se trata de San Juan Huactzinco, donde al alcalde Antonio Robles Pineda, su novia le colocó una “amorosa manta” con motivo de su onomástico.

¡Qué lindo!, resulta conmovedor tanto amor, lo malo es que se utilicen bienes públicos para transmitir mensajes que se suponen deben ser privados.

El alcalde y su novia deberán asumir las consecuencias, dado que están dispuestos a mezclar su vida personal con su labor pública, al rato que no se quejen.

Nos leemos la próxima semana