INSTRUCCIÓN
13 de junio - 2019

Por Edgardo Cabrera

Tras el diferendo con el presidente Donald Trump, el ejecutivo nacional Andrés Manuel López Obrador dio instrucciones al gabinete de Bienestar para elevar las metas de sus programas sociales y en algunos casos, los objetivos programados para el 2020 tendrán que agilizarlos para este año.

Lo anterior como parte del plan migratorio de 45 días pactado con el gobierno de Estados Unidos y evitar así la imposición de aranceles a los productos mexicanos que se exportan a esa nación.

El problema para Tlaxcala es que la encargada de los programas federales anda más ocupada en atender su agenda personal ante su preocupación de quedarse sin ser candidata a la gubernatura por Morena, y esa posibilidad crece con cada una de sus malas decisiones.

Por ello es que pensar que en la entidad se van a adelantar los objetivos planteados para el 2020 es mucho pedir, máxime cuando con los de este año no puede, ahí están los reclamos por los atrasos en la entrega de apoyos, las deficiencias del padrón del Bienestar y la distracción del personal así como de los funcionarios de la dependencia para atender la agenda proselitista de Cuéllar.

APOYOS FEDERALES “PARA AMIGOS”

A colación de su asistencia a un evento político el viernes pasado, nos enteramos que las pruebas fueron enviadas tanto a Morena como al gobierno Federal, donde no gustó en nada su distracción en tareas ajenas a su función pública, justo cuando se vivían fuertes tensiones con EU.

Ante la evidencia documentada, salieron a decir que la agrupación política “Amigos por Tlaxcala” no pretende constituirse como partido político, sino que es “una red de apoyo para sectores de la población que se encuentran en vulnerabilidad… para poder lograr un mayor alcance con los esquemas de apoyo que han establecido para personas de escasos recursos”.

Y lo anterior es aún peor, ya que el presidente de la República advirtió desde su llegada al cargo que los apoyos gubernamentales se entregarían de manera directa a los beneficiarios, no por medio de intermediarios como pretenden hacerlo Guadalupe Rodríguez y Pedro Erazo con la venía, protección y patrocinio de Cuéllar.

También, luego de ser balconeada, se intentó borrar todo rastro con la autoridad electoral y frenar momentáneamente el proceso de constitución de partido político.

ESCÁNDALO TRAS ESCÁNDALO 

Mientras en el Tribunal Superior de Justicia del Estado los magistrados, consejeros y jueces andan metidos en la grilla política interna, a la orden del día están las quejas por la dilación en la resolución de los casos que ahí se litigan y hasta el extravío de expedientes y promociones.

Este miércoles las protestas llegaron hasta los juzgados y la oficina presidencial, donde la abogada Félix Pozos arremetió en contra de la juez familiar Juanita Munguía a la que culpó de extraviar documentación y retrasar los procedimientos que están en sus manos.

De paso también le tundió al flamante nuevo presidente del TSJE, Mario Jiménez, amigo de la juez Juanita, quien se negó a recibir a la quejosa y se limitó sólo a señalar que se atenderá su asunto.

En tanto que los consejeros de la judicatura, cómplices y “socios” de magistrados así como de jueces (entre ellos Juanita) que apoyaron la rebelión contra Héctor Maldonado, difícilmente harán algo para atender las quejas por la incompetencia y presunta negligencia. 

Eso sí, pronta y expedita sigue la justicia en el caso de la pugna legal en la que se encuentran inmersos los magistrados y sus compinches.