Por «confusión» remiten a dos mujeres ante la autoridad
23 de mayo - 2019

Efectivos de la policía municipal localizan a señalada de despojar de su dinero a octogenaria

Por Alfredo González

Este jueves por la mañana, la oportuna intervención de elementos policiacos de la capital, permitió esclarecer de forma favorable el hecho probable de delito ocurrido en pleno centro histórico; que involucró a dos mujeres, las que fueron remitidas ante la autoridad competente.

Información señala que en la esquina de Primero de Mayo con 20 de Noviembre, Catalina -N- de 68 años de edad, vecina de Hueyotlipan, fue auxiliada por transeúntes a quienes dijo que momentos antes había sido abordada por una mujer; quien le ofreció productos de herbolaría y que tras esto, no encontraba el dinero que acababa de retirar de una institución bancaria ubicada sobre la calle Porfirio Díaz.

Al tiempo, policía municipales se hicieron presentes en el sitio que congregó a más gente y se entrevistaron con la posible afectada, quien entre sollozos les hizo saber su reciente experiencia, que incluyó la descripción física de la fémina con la que había platicado e incluso pudo referir con qué dirección se habría retirado.

Ya con esos datos, los representantes de la ley buscaron en espacios y edificios cercanos, siendo en el de la Parroquia de San José donde ubicaron a Rosa -N- de 60 años de edad, quién al coincidir con la descripción que fue corroborada con un señalamiento directo por la octogenaria; se le invito a acompañar a los uniformados a la Comisaría de Seguridad Pública capitalina para aclarar la situación, a lo accedió sin oponer resistencia.

Ya en la Comandancia, las dos mujeres fueron entrevistadas y se les pidió su versión de los hechos; sin embargo al solicitar a Doña Catalina que colocará sobre un escritorio y revisará a conciencia sus pertenencias, al abrir la carterita que contiene sus documentos para el cobro de un programa social «aparecieron» entre estos, los 600 pesos que había cobrado.

Entonces la adulto mayor, visiblemente apenada y tras reconocer su «confusión» se disculpó con la mujer que señaló y con los uniformados por haberlos distraído de sus obligaciones, a quienes hay que decir les reconoció la pronta y efectiva atención para el caso que se presumía había ocurrido, por lo que al no haber delito que perseguir las dos mujeres fueron dejadas en libertad.