Embusteros
5 de abril - 2019

Por José Luis Ahuactzin

Embusteros resultaron los “legisladores”  Víctor Castro López y El Chema Méndez, quienes engañan flagrantemente a los tlaxcaltecas hacer creer que “legislan” cuando sólo ocurrencias y simplezas salen de su boca.

Resulta que Castro López escudado en el fuero que le otorga la constitución, el jueves en la sesión usó la más alta tribuna del Estado para decir que quiere hacer una rifa como mero acercamiento con reporteros de diversos medios de comunicación, ¿Cómo para qué?

Se le olvidó al petista que se encuentra en la sede del Poder LEGISLATIVO  y no es ni casa de sorteos o apuestas, ni cantina para jugar apuestas y ver quién cae en su juego; por cierto de psicología barata.

O será que se considera de la beneficencia pública o madre de la caridad para andar rifando objetos que él mismo desconoce, porque solo en su diezmilésima parte de corteza cerebral existen regalos como “audios”; en el gremio periodístico se utilizan grabadoras digitales, luego entonces no se sabe a ciencia cierta qué es lo que pretende “regalar”.

Y otro de los que no se quedaron atrás es El Chema Méndez, diputado por el distrito X de Huamantla, quien adoptó una acción al puro y viejo estilo de la mafia del poder: del cohecho o del soborno, o ni eso; más bien de la mordida.

Resulta que el martes pasado la reportera de FM Centro, Aracely Sánchez, buscó una entrevista por ser el presidente de la comisión instructora de juicio político, y esté “señoritingo” sacó de la bolsa del pantalón un billete de $500 pesos para que se hablará “bien” de su “trabajo”.

Recordemos que el diputado arrastra una mala imagen cuando en el 2018 se denunció públicamente que enfrenta 8 procesos legales, de los cuales, en 3 de ellos le demandan el reembolso de 16 millones 863 mil 428.31 pesos.

Las denuncias presentadas en su contra van desde juicios mercantiles, falsificación de documentos, probable fraude, lesiones, chantaje, falsificación de documentos, simulación de actos jurídicos, por mencionar algunos; de ahí la urgencia por resarcir su imagen.

No cabe duda que los de la transformación de cuarta están urgidos de una buena imagen, pero ni con dinero ni con regalos la cambiarán, simple y sencillamente porque su labor es legislar, gestionar y fiscalizar, cosa que desconocen.