Por Alfredo González

Senda bronca acarrea sobre sus hombros la Benemérita en Apizaco, pues las malas prácticas y yerros de los prehospitalarios tuvieron severas consecuencias en la integridad de un joven que perdió una extremidad por negligencia.

Y es que el mal manejo emergencia en la ciudad de Apizaco, la mala valoración de un hecho de tránsito el domingo, le costó perder la pierna a un joven que hoy se cuenta entre las víctimas de una mala decisión.

Estando atrapada su pierna entre hierros y su vehículo y un objeto fijo, los paramédicos decidieron mal su actuar, causando que una fractura de pierna se agravará al desprender los tejidos.

Ahora el entuerto pesa sobre la delegación que encabeza un Tamayo, pues la queja no sólo quedará en local, pues les guste o no, la Cruz Roja es un organismo internacional regido por distintos organismos que deberán indagar y sancionar las pifias de quienes en teoría, debieron estar capacitados para atender la emergencia.

¿Será que la Luna se ponga roja en la Delegación?

El club de Toby

De poca monta e irrelevante han tomado muchos la conferencia del alcaldes que poco honrosamente preside el buen Chairez, un club de 40 ediles que dicen harán malabares para sortear las pifias de seguridad de las que adolecen sus gobernados, pues seguramente entre tanta ocurrencia y estrategia fallida han de encontrar la solución hasta para las enfermedades.

La ideota, solo le dará unas líneas más al currículo de quien presida este «club de Toby», una excusa para engullir viandas y alipuz entre los que dicen saber gobernar desde la silla grande de la que defienden su «autonomía».

Habrá que ver si realmente tiene utilidad alguna la comitiva de la incompetencia, pues todo parece indicar que como los «síndicos, no será más que una forma de establecer los tabuladores estándar para el moche, pues dicen por ahí que ya hay tarifa mínima para rubricar los estados financieros mensuales.

¿Y el Sears Apá?

Vaya usted a saber para cuándo se concrete la segunda etapa de Galerías Tlaxcala, pues del famoso Sears que aterrizaría en tierras de Atlahapa solo hay letreros en la plaza.

De la primera tienda de esta cadena estadounidense sólo se aprecia una malla ciclónica en donde se debería erigir, al menos en teoría, sin embargo, a casi dos años de que se abrieran las puertas del complejo comercial ni una piedra han encimado.

Incluso, es ya más visible el trabajo y avance en el complejo Parque Vértice, donde se aprecia que con premura toma forma lo que será un atractivo comercial en el centro de la capital, y muy seguramente la lápida en la añeja plaza que albergó alguna vez un Gigante.

Habrá que ver que sucede en lo posterior con dicho proyecto, lo que es innegable que es Tlaxcala ha crecido y mucho, pues sin dejar de tener ese encanto colonial se nota un cambio radical en la periferia al centro histórico.

Y mientras la cadena departamental se decide o no a llegar a estas lomas, no dudemos que nuevos proyectos e inmuebles empiecen a mutar el paisaje.