Por Edgardo Cabrera

En el elefante blanco que opera en el ex cuartel militar de Apizaco van de mal en peor, su titular y protegido del ahora flamante director de Canal Once, se ha dedicado a firmar una serie de convenios fuera de la legalidad.

Su afán protagónico lo llevó a signar un acuerdo con Tlaxco para –según él- “llevar la cultura a 37 comunidades” de dicho pueblo mágico.

Resulta que el arquitecto Carmona formalizó dicho compromiso sin la autorización del patronato del Centro Cultural.

Es claro que el ex director del CERESO, en los tiempos de Álvarez Lima, le ha dado por ser farol de la calle y oscuridad de la casa firmando convenios y engañando a alcaldes, pues no sólo carece de la facultad legal para realizarlos, sino que tiene quebrado económicamente a ese lugar que se cae en pedazos.

Sería bueno saber si les pidió algo a cambio $, porque es por todos conocido que no da paso sin huarache, basta preguntarles a los artistas que piden el auditorio de La Libertad para presentar sus obras y quienes reciben como respuesta la petición, no sólo de una retribución económica, sino también en especie, y eso incluye desde libros, hasta boletos de cortesía para el arqui y sus cuates.

Por cierto, es la fecha que no ha podido resolver el tema de un adeudo de más de medio millón de pesos en impuestos.

QUEMÓN

Vaya quemón el que recibió la secretaria de Cultura federal este fin de semana, luego de que se ventilara un oficio enviado al personal de la dependencia y mediante el cual se les notificó que este lunes se suspendían labores en la dependencia ya que era feriado con motivo “de la Batalla de Puebla”.

Como era de esperarse, la noticia circuló como reguero de pólvora en las redes sociales, al criticar duramente y responsabilizar a la titular de la dependencia, Alejandra Fraustro, por equivocar la fecha de la conmemoración de la promulgación de la Constitución Política con la Batalla de Puebla.

El asunto es que el documento con dicho error fue firmado por el director de Administración de la Unidad de Administración y Finanzas de la dependencia, Hugo Fernando Huesca Granciano, más no por la secretaria, de ahí que lo lógico hubiera sido que dicho funcionario asumiera el error y pidiera una disculpa.

Sin embargo, en una suerte de malabarismo, el vocero Antonio Martínez Velázquez (sobrino del ex secretario de salud estatal, Julián Velázquez) trató de negar la veracidad del oficio ventilado, sin embargo medios como Reforma y El Universal pudieron constatar la autenticidad de la circular DGA/ 0422/2019.

La mala reacción provocó que el yerro siguiera creciendo hasta convertirse en trending topic en Twitter, donde la mofa fue la constante.

Para rematar, desde el propio partido del Presidente López Obrador, en un acto más de canibalismo, se multiplicaron los ataques en contra de la secretaria Alejandra Fraustro quien, ni la debe, ni la teme en este asunto donde sus empleados son los únicos culpables.