Por Edgardo Cabrera

Ignorando celos políticos y los ataques que recibió por su “osadía” de atraer más reflectores que la virreina Lore, ayer domingo la senadora Ana Lilia Rivera debutó en la carrera por la gubernatura y mostró que tiene los tamaños para construir y competir por la candidatura.

En contraste, el senador José Antonio Álvarez Lima se despidió de la curul ya que está a unas cuantas horas de abandonar la Cámara Alta para integrarse a la dirección de Canal Once.

El pretexto fue un informe de labores correspondiente al primer periodo ordinario de sesiones, para lo cual la Morenista mostró músculo, según los cálculos, reunió a más de 3 mil almas en el Domo Blanco del Centro de Convenciones de Tlaxcala.

Si bien la gran mayoría fueron acarreados por medio de decenas de autobuses y después fueron convidados a una comilona (al más viejo estilo del PRI), en lo político quedó claro que hasta el día de hoy, dentro de Morena, ya no existe sólo una figura con posibilidades de levantar la mano para la sucesión.

El informe-mitin también sirvió para dejar en claro la ruptura entre dos grupos: el que integran los senadores Ana Lilia, Álvarez Lima y Joel Molina, así como el de Lorena Cuéllar.

Para empezar, el lorenismo desairó el evento, no llegó la súper delegada, pero tampoco sus principales corifeos y lamebotas, entre ellos el servil Rubén Terán o los levantadedos locales Rafael Ortega, Víctor Castro, Michael Brito y otros div@s más.

En contraste destacó la presencia de la diputada federal Claudia Pérez, el próximo senador, Joel Molina Ramírez, el senador Ricardo Monreal Ávila, y otros personajes como el designado presidente del IAIP, David Cabrera Canales y el magistrado del TSJE, Fernando Bernal Salazar.

También estuvieron ahí los diputados locales de Morena Jesús Pérez, María de Lourdes Gutiérrez,  Ana Bertha Mastranzo, Víctor Báez, Patricia Jaramillo, y María del Rayo; del PT, Irma Garay; y del PES, Luz Vera.

Tampoco podían faltar los izquierdosos y siempre camaleónicos Vicente Castellanos y Luis Macías.

MADUREZ POLÍTICA

Por cierto, y mientras hay un bloque empecinado en la confrontación y los ataques, esos que quieren ver sangre, a petición de Álvarez Lima y Ana Lilia Rivera, previo al mitin-informe hubo una reunión entre los senadores y el gobernador Marco Mena.

En el encuentro estuvo el coordinador de Morena en el Senado de la República, Ricardo Monreal, e incluso la diputada federal Claudia Pérez, suplente de Lorena Cuéllar.

En este marco Monreal le comentó al gobernador que hay plena disposición de apoyo, y en particular destacó el respeto y trabajo que ha mostrado la administración estatal a pesar de ser de un partido político distinto.

Como era de esperarse, la virreina y sus vasallos enloquecieron y empezaron a descalificar la reunión, aunque en realidad, se sabe que lo que le molestó es que no fuera invitada.

Con ello queda una vez más claro que el cargo de “súper delegada” simplemente es de membrete, en los hechos la verdadera coordinación se da en otros niveles.