LA “MINÚSCULA” MANIFESTACIÓN
18 de enero - 2019

Por Edgardo Cabrera

Con poco más de cuatro meses en el cargo los levantadedos locales suman dos grandes protestas que llegan a la sede del Palacio Legislativo por parte de la clase trabajadora.

Los primeros fueron empleados del sector salud quienes doblegaron al petista Castro quien terminó exhibido por mentiroso ya que nunca pudo probar sus dichos en contra del personal médico al que acusó de sustraer recién nacidos, asesinar a pacientes y otra serie más de señalamientos sin sustento. Por cierto, tampoco pudo probar sus acusaciones en contra de la líder sindical, Blanca Águila.

Ahora de nueva cuenta llegó un nutrido número de burócratas y pensionados del estado para protestar contra el recorte millonario que aplicaron al presupuesto de  salud, educación y Oficialía Mayor.

Aunque algunos miopes trataron de minimizar la manifestación, incluso no faltó un gato de la cuarta transformación que dijo que era “minúscula”, a la hora de la verdad y ante la negativa de ser atendidos, los cientos de manifestantes terminaron por irrumpir en la sede del Congreso luego de forzar el portón de acceso que les había sido cerrado con candado.

El numeroso grupo de inconformes obligó a los asambleístas a huir del salón de plenos, incluso algunas diputadas entraron en crisis nerviosa y no pudieron controlar los temblores en su humanidad al momento de salir como tapón de sidra tras suspender la sesión que se desarrollaba.

Como resultado de la presión, una comisión de legisladores accedió a sostener un diálogo con los representantes de los sindicatos 7 de mayo, Sección 55 del SNTE, Justo Sierra, Mártires de 1910, Juárez Blancas y pensionados.

No obstante, pese a que trataron de matizar las cifras, los inconformes no se dejaron convencer del supuesto pretexto de la “austeridad” para afectar las prestaciones de la clase trabajadora, máxime porque resulta incongruente su justificación cuando el Congreso de Tlaxcala fue exhibido a nivel nacional como la segunda legislatura local del país que registró un mayor incremento presupuestal respecto al ejercicio fiscal anterior, hablamos de más de 30 por ciento con lo que se cubren sus dietas de más de 105 mil pesos mensuales y una bolsa de gestión de 400 mil pesos para cada legislador.

Al final los levantadedos se comprometieron a mantener intacta la propuesta del ejecutivo relacionada con las prestaciones y condiciones laborales de la clase trabajadora, ya veremos si sí cumplen o de nueva cuenta es necesaria la movilización de los sindicatos.

POR CIERTO

En eso de las protestas, recordemos las inconformidades de mujeres de la tercera edad de Ixtenco  que casi abofetean al diputado del PES, José Luis Garrido, por negarse a atender sus quejas respecto a inconformidades con el alcalde.

También está la de estudiantes de la FNERRR, de pobladores de Teolocholco contra la diputada Lourdes Montiel, transportistas, así como maestros que también se manifestaron al momento en que pretendían aprobar el presupuesto de egresos 2019.

Y aunque traten de justificarse al señalar que las protestas se deben a que su labor legislativa “trastoca los intereses de la mafia del poder”, en los hechos queda claro que aquí los únicos mafiosos son ellos al exhibir su ambición desmedida por el recurso público para su beneficio y la parálisis en que se mantienen a no desahogar la larga lista de pendientes que tienen, entre ellos sus propias iniciativas planteadas.