Lo correcto
5 de diciembre - 2018

Por Edgardo Cabrera

Marco Mena presentó su segundo informe de labores y en su mensaje lo que más llamó la atención fue el anuncio del arranque de un nuevo programa gubernamental. Se denomina Supérate y tiene el ambicioso objetivo de sacar de la pobreza extrema a 74 mil tlaxcaltecas.

Dicho plan se encuentra integrado en el paquete presupuestal enviado al Congreso del estado y considera una inversión de 200 millones de pesos para atender a la población más pobre del estado.

Al anunciarlo, Marco Mena enfatizó que atenderlos no solamente es viable (dado las finanzas sanas que presenta su gobierno), sino lo correcto.

Según lo explicado por el mandatario, Supérate no es un programa paternalista, sino que está basado en las experiencias exitosas de al menos una veintena de países, por lo que considera desde apoyos monetarios hasta transferencias de activos para micro negocios, capacitación, abrir cuentas de ahorro en el Banco del Bienestar, asegurar a los beneficiarios y otras acciones más.

El programa no se trata de una mera ocurrencia ni está improvisado, fue presentado al entonces presidente electo, Andrés Manuel López Obrador, en su visita de septiembre pasado al estado, quien le dio su aval, sobre todo porque tiene candados para garantizar la transparencia y rendición de cuentas.

Hablamos que en Tlaxcala se pretende combatir la pobreza desde dos frentes a partir del 2019, por un lado desde el ejecutivo estatal con Supérate, y desde la federación con los programas asistenciales que anunció desde campaña AMLO.

Solamente alguien fuera de sus cabales podría estar en contra de que se destinen recursos públicos para los más pobres, veremos cómo actúan los levantadedos quienes están a días de aprobar el presupuesto.

Como dato, mientras el Congreso quiere un aumento de 24.7 por ciento, para que su presupuesto ascienda a 301.5 millones en beneficio de 25 personas, el nuevo programa destinaría 100 mdp menos que ellos a favor de 74 mil tlaxcaltecas.

DOS ARISTAS

Por cierto, en eso de las locuras y los defectos de carácter, llamaron la atención las muecas que no pudo ocultar la virreina al momento en que Marco Mena anunció el programa Supérate.

Fue la única que no aplaudió el anuncio y que no pudo ocultar su enojo.

No olvidemos que desde hace unas semanas mandó a sus operadores políticos a registrar a la población más desprotegida en el denominado “padrón del bienestar”, requisito que están pidiendo para incorporarlos a los beneficiarios de los programas asistencialistas federales.

Su reacción causa extrañeza, máxime cuando se supone que ya es gobierno y debe coordinar acciones conjuntas, así como respaldar iniciativas que van conducidas al mismo fin.

AUSTERIDAD

A colación del llamado del presidente López Obrador a hacer gobiernos austeros, y mientras el legislativo local hace gala de su voracidad, Marco Mena respondió a la convocatoria por medio de algunos datos ofrecidos en su informe.

Expuso que las tres principales obras que se ejecutan desde este año y cuya inversión es de alrededor de mil millones de pesos, son financiadas con ahorros y mediante las propias partidas presupuestales que se le asignaron al ejecutivo estatal.

Hablamos que para la ampliación de la carretera Apizaco-Tlaxcala, la construcción del nuevo hospital capitalino y el Estadio Tlahuicole, no se contrató deuda.

De igual forma, se canalizaron otros recursos públicos que estaban dispersos en partidas no indispensables a la implementación del Sistema Estatal de Becas que destinó 130 millones de pesos en 2018 en beneficio de más de 10 mil estudiantes.

Adicionalmente dio a conocer cifras sin precedentes en inversión de la iniciativa privada y generación de empleos, no obstante en el rubro de seguridad pública faltó mayor información, y es que no olvidemos que en su primer informe planteó la compra de mayor equipo así como duplicar el número de efectivos policíacos.

Aunque lo escueto de su mensaje en este rubro podría obedecer a la expectativa por la implementación de la nueva estrategia de seguridad ya que el equipamiento y la contratación de personal podría concentrase solamente en la federación para homogenizar desde las compras hasta los perfiles de los policías.