Por José Luis Ahuactzin

Es de sorprenderse cómo es que en Tlaxcala pasa todo y, al mismo tiempo, no pasa nada.

Los diputados locales se encuentran más enfrascados en resolver sus pleitos internos que solucionar los conflictos municipales, de juicios políticos, acusaciones por desvíos de recursos, por ejemplo, en el PT.

Lo que llama la atención es cuando quieren legislar se la viven presentando iniciativa tras iniciativa a la Constitución local; en menos de 15 días ya han planteado poco más de cuatro reformas, para esta época es un exceso y por decirlo coloquialmente, es un parchadero a la norma suprema local, afortunadamente sólo han quedado en iniciativas.

Lo cierto es que en el PT los diputados mantienen la marginación y la ley del hielo contra su coordinadora Yordana Garay, porque aún no se les olvida ese acuerdo pactado “en lo oscurito” para la designación de áreas técnicas, y en su caso beneficiándose con el área de (in) comunicación social, a través de su flamante vocero que ha cometido error tras error en su primera semana como funcionario.

Dicen que el tiempo cura las heridas, pero entre los del PT parece que está más abierta y entre ellos se chupan la sangre.

Resulta de Garay Loredo, ha admitido que su correligionario el ex edil de Tzompantepec, Víctor Castro López, ha abusado de su condición de diputado y en breve le exigirán que presente las pruebas sobre sus acusaciones contra el sector salud, sobre desvío de fondos, desabasto de medicamentos, robos de infantes y homicidios en quirófanos.

O que presente las pruebas sobre la acusación de robo de recursos del Poder Legislativo por algunos diputados de la pasada legislatura, entre ellos señaló directamente a Arnulfo Arévalo Lara, del PRI.

Es más el Sindicato Nacional de Trabajadores del Sector Salud, sección XXVII, entregó a los diputados un escrito que tilda de ignorante, porro, de imaginación surrealista, irresponsable, exhibicionista, y vándalo al señor Castro quien sólo busca reflectores para asuntos de otra índole.

Incluso, denunciaron que el legislador ha abusado de su condición de diputado, a tal grado de irrumpir áreas blancas de hospitales sin el debido uniforme bajo normas sanitarias.

Y en esta parte estoy de acuerdo, pues el que acusa está obligado a probar; de lo contrario o es cómplice, o busca algún interés para tener un beneficio personal.

Por si fuera poco, se ha dado el trámite legislativo a dos propuestas para deponer a Yordana Garay Loredo de la coordinación, y en su caso nombrar a Mary Félix Pluma como la nueva coordinadora.

Pero, en un documento alterno, el PT cuyo dueño es su papá el diputado federal Silvano Garay, notificó al Congreso que el único facultado para deponer de cargos internos es el partido político, y por lo pronto la designación sigue firme.

Es más, ya amagó con expulsar a quienes atenten contra los intereses del PT y contra quienes contradigan al instituto político, como una medida de sanción.

Veremos en los próximos días la conclusión de esta comedia tlaxcalteca protagonizada por los militantes del Partido del Trabajo, los adheridos a la cuarta transformación.