Encarcelan a cirujano plástico multi homicida en Tlaxcala y Puebla
16 de octubre - 2018

El galeno tenía ya en su haber la presunta responsabilidad de varios decesos

Por Alfredo González

Daniel N. , uno de los cirujanos que laboraba en la Clínica Spa Dorada en el estado de Puebla y que el pasado fin de semana fue vinculado a proceso por el homicidio de una paciente, contaba con señalamientos previos por negligencia médica en el estado de Tlaxcala, donde una mujer perdió la vida mientras era intervenida por el galeno en el año 2015.

Daniel N., junto con otros tres empleados y el dueño de la clínica situada en la colonia Huexotitla de la ciudad de Puebla, fueron vinculados a proceso por homicidio y usurpación de funciones, esto tras la muerte de la paciente Claudia Verónica Nolasco Villareal el miércoles 10 de octubre.

En el caso específico de Daniel, el agente del Ministerio Público solicitó que se le procesara por homicidio doloso por acción, esto debido a que fue uno de los que intentó reanimar a Claudia Verónica cuando la paciente sufrió al menos tres paros cardiacos mientras se le practicaba una liposucción y aumento de senos.

Además, según fuentes en aquella entidad, no es la primera vez que Daniel se ve involucrado en señalamientos de negligencia pese a ostentarse como maestro en cirugía médica, ya que en 2015 recibió una denuncia por la muerte de una mujer que acudió a su clínica en Tlaxcala para practicarse un aumento de glúteos.

Siendo dueño de la Clínica de Especialidades Huamantla, el 13 de agosto del 2015 recibió a Dulce María García Islas, de 30 años de edad, a quien le practicaría una cirugía estética en la espalda baja, argumentando que la intervención no demoraría más de 30 minutos, según relató la familia a diferentes medios de la región.

Sin embargo una mala aplicación de la anestesia le causó un paro cardiorrespiratorio, por lo que en la clínica se le aplicó un método de resucitación que le causó lesiones en la tráquea y fractura de cuatro costillas, motivo por el cual la trasladaron a un hospital del sector salud de Tlaxcala, donde simplemente confirmaron su fallecimiento.

Los familiares de Dulce María, quien estaba casada y tenía dos hijos, promovieron una denuncia ante la Procuraduría General de Justicia de Tlaxcala, sin embargo la investigación no prosperó y Daniel M. conservó su licencia médica pese a que el retiro de la misma era la principal demanda de la familia de la víctima.

Por su parte la clínica de Daniel M. sí fue clausurada por las autoridades de Huamantla al confirmarse que operaba sin permisos y en condiciones poco salubres, siendo este el único logro que consiguió el caso de Dulce María.