El Mes Rosa
4 de octubre - 2018

Por Mauricio Hernández Olaiz

El mes de octubre es reconocido mundialmente como el mes rosa. Lo anterior para crear conciencia a hombres y mujeres sobre el cáncer de mama y así promover la autoexploración, revisiones periódicas y chequeos para poder detectarlo a tiempo.

Aunque hay una gran variedad de cifras, un promedio lo más cercano a la realidad, nos dice que esta enfermedad tiene una alta tasa de mortalidad en nuestro país, tan sólo en México se presentan 15 muertes al día, una cifra que lamentablemente, sigue en aumento.

Las razones de su tasa de crecimiento son variadas, pero expertos las asocian a la mala alimentación, el uso indiscriminado de equipos que irradian ondas consideradas cancerígenas, el tabaco, el alcohol, la ausencia de actividad física, obesidad o sobrepeso, o simplemente por cuestión genética.

Esta enfermedad no sólo la padecen las mujeres, un porcentaje menor de hombres también es afectado. El Instituto nacional de Cancerología afirma que el cáncer de mama es curable si se detecta a tiempo, desafortunadamente, la desinformación conlleva a que el índice de mortalidad oficial en nuestro país se mantenga por encima del 23%, pues la mayoría de las mujeres no lleva a cabo chequeos médicos regulares o bien la autoexploración y cuando los síntomas son demasiado evidentes ya es difícil combatirlo o curarlo. Una cifra triste nos dice que es la principal causa de muerte en México en mujeres mayores de 25 años.

Una Lucha de fe

Simplemente nos tomó por sorpresa, pese a que mi esposa se auto exploraba de manera regular, un día, simplemente de la nada, apareció una pequeña bolita en el seno izquierdo. Difícilmente se quiere creer que es la primera señal de un cambio de vida total, la mente nos juega en contra y tanto uno como otro tendimos a minimizar el tema, “debe ser un barro, un granito o cualquier cosa menor”, sin embargo creció rápido, no era normal, ahí comenzó el viacrucis.

Y es que por más “informado” que te creas, la verdad es que en esos momentos se cierra el mundo, al no contar con seguro social, y por la preocupación y premura del caso, lo primero que haces es buscar a un “especialista”, ahí comienza la cadena, que le llamo de extorsión. Tristemente muchos médicos particulares evitan informarte de espacios o centros especializados, pues su interés primordial, no es curarte, sino sacarte dinero. Te mandan a hacer los estudios pertinentes, Mastografía, ultrasonido…siempre en laboratorios privados con los cuáles tienen convenios, comienzan los gastos para llegar al triste veredicto.

“Les puedo confirmar que existe un tumor en el seno, pero debemos proceder a realizar una biopsia lo antes posible para determinar su malignidad, así como para poder comenzar a pensar en el tratamiento respectivo, que seguramente incluirá sesiones de quimioterapias”.

De inmediato “el especialista” tomó su recetario y solicitó estudios de sangre, la biopsia y costeo de quimioterapia en el lugar que consideraba más adecuado, por sus comisiones claro está. De entrada la biopsia tenía un costo de poco más de 9 mil pesos, y las quimios solicitadas (6) tenían un costo de $60 mil pesos más medicinas. Al momento ya se llevaban gastados poco más de 16 mil pesos y ni siquiera habíamos comenzado.

Simplemente era incosteable. ¿Qué vamos a hacer?. No le miento querido lector o lectora, me invadió una terrible depresión, ¿Cómo podía ayudar a mi esposa a salir de esto?. Insisto es el inicio de una lucha contra todo, el cambio de vida es incuestionable.

Pero como todo en la vida y en esta lucha frontal contra la enfermedad, las opciones existen y la voluntad de enfrentarlo también. Una gran amiga que trabaja en el DIF municipal de Tlaxcala nos recomendó visitar a la doctora del DIF, quien de inmediato, y al revisar los estudios y a mi esposa, no tuvo reservas para afirmar que muy probablemente era cáncer de mama. De inmediato nos canalizo a un espacio, en ese entonces desconocido para nosotros, pero que nos brindó toda la oportunidad, nos dio las herramientas, pero sobre todo la fortaleza para enfrentar el mal.

El UNEME DEDICAM ( Unidad Médica de Especialidad para la Detección y Diagnóstico de Cáncer de Mama)

Ubicado en la zona de hospitales de San Matías Tepetomatitlán e inaugurada en el año 2013, el UNEME DEDICAM es un espacio especializado con equipos de última generación y tecnología de punta. Al llegar comenzamos de cero, así es, de cero. Todos los gastos realizados con particulares se fueron a la basura, pues el lógico protocolo del UNEME es, pese a mostrar la evidencia de los médicos antes visitados, es comenzar los estudios de nuevo, sin contaminación, con la más alta tecnología en el estado, pero esta vez sin ningún costo.

Mastografía y ultrasonido de nueva cuenta, el paso de la biopsia, todos realizados con un enorme profesionalismo. Finalmente el diagnóstico era el esperado, Cáncer de mama, pero en UNEME detectaron dos tumores, no solo uno, como lo afirmaban los “particulares”, y uno de ellos, un pequeño ganglio que ya presentaba metástasis.

De inmediato la especialista oncóloga de UNEME nos daba los pasos a seguir en esta lucha sin cuartel, pero antes una reunión con la psicóloga, la noticia nunca podrá ser sencilla de digerir.

Lamentablemente en UNEME DEDICAM solo detectan y diagnostican, no combaten, pero para ello tienen un convenio con el FUCAM AC (fundación de cáncer de mama), un espacio creado para la lucha y erradicación del Cáncer de mama en México. Fuimos de inmediato canalizados y recibidos ahí.

Como toda fundación el FUCAM sobrevive de donaciones de particulares, de apoyos gubernamentales a través del seguro popular, y de los pacientes. Al llegar nos hacen un estudio socio económico para pagar lo justo, simplemente en la medida de nuestras posibilidades, pero para mujeres de sectores marginados o de bajos recursos, todos los servicios son completamente gratis.

En FUCAM, con tan solo un personal de 140 médicos, se atiende a un 8% de los casos de cáncer de mama del país, su tasa de éxito es del 93% y el objetivo es llegar al 96% en el 2021, en un año llevan a cabo 53,239 estudios de mastografía, 77 mil consultas externas, 16,602 quimioterapias, 4,421 tratamientos de medicina nuclear, 5000 estudios de rayos x, 28,500 ultrasonidos mamarios, 1500 internamientos hospitalarios, 2700 cirugías, 9,558 radioterapias entre otros.

Sin duda el cambio de nuestra vida ha sido casi radical, vivimos con lo justo pero luchamos de frente, como familia seguimos teniendo diferencias, tenemos malos días, a veces no vemos llegar la luz, pues la pelea contra el cáncer de mama tiene tratamientos muy agresivos para un miembro vital de la familia, la recuperación luego de una quimio es lenta, delicada y muy molesta. Sin embargo gracias a estas dos instituciones la lucha se hace un poco más pareja, no nos quedamos a la deriva por falta de recurso, no tenemos pretexto para no enfrentar la enfermedad, especialmente la protagonista de la historia, mi esposa, Sandra, a quién amo, quién es la verdadera guerrera, la luchadora incansable, hoy nuestra hermosa pelona es la que, día a día, nos da fuerza y entusiasmo.

Hoy queridos lectores les invito a conocer el UNEME DEDICAM en Tlaxcala, El FUCAM AC en la ciudad de México, espacios que nos dan la alternativa para salir adelante contra este terrible mal, pero sobre todo a informar a sus familias, amigos y vecinos, de que existen estas alternativas de muy bajo costo o hasta gratuitas, que eviten ser estafados por los dizque “especialistas”, pero por sobre todas las cosas:

Que se quieran, se auto exploren y se cuiden.

@olaizmau