Lenguaraz
19 de septiembre - 2018

Por Edgardo Cabrera

Una vez más el diputado Castro dio la nota negativa del Congreso, resulta que a El Sol de Tlaxcala declaró que el ex diputado Alberto Amaro y su entonces secretario Técnico, Gregorio Cervantes, lo trataron de extorsionar con 200 mil pesos y como –según él- no aceptó, le reprobaron la cuenta pública de sus últimos tres meses como alcalde de Tzompantepec.

Pero con lo que no contaba el hablador es que hasta al Congreso llegaría uno de los aludidos quien lo encaró y le exigió retractarse de sus dichos.

Se trató de Goyo Cervantes quien, además, lo retó a probar dicho señalamiento ante el Ministerio Público.

Como era de esperarse, el lenguaraz diputado no pudo sustentar su dicho y de forma cómoda acusó al medio de comunicación de tergiversar sus declaraciones y se comprometió a dejar de hablar en contra del aludido.

Por lo pronto, mientras son peras o manzanas, queda claro una vez más que Castro es poco confiable en sus declaraciones con las que simplemente pretende atraer reflectores y, para la desgracia de los ciudadanos, no faltan los incautos que caen atrapado por su labia.

Aquí lo único cierto, más allá de su incontinencia verbal, es que en el último trimestre del 2016 el OFS le encontró una serie de observaciones que superan los 5 millones de pesos entre ellas que fue sobregirada la partida de Servicios Personales, anomalías en la compra de materiales y suministros, inconsistencias en los gastos de Servicios Generales, pagos improcedentes, así como transferencias, asignaciones y subsidios mal aplicados.

Por cierto

A colación de esto, nos cuentan que las diferencias con Goyo datan del proceso electoral ya que la familia Cervantes se negó a apoyarlo en sus aspiraciones políticas en el III distrito, de ahí que ahora busca revancha.

Aunque el ex alcalde abanderaba la que sería la aplanadora de la alianza pejista, y así les vendió la idea, los Cervantes no quisieron tener ninguna relación con dicho personaje ya que saben de qué pie cojea.

Boda

Será el próximo 29 de septiembre cuando la tlaxcalteca Dulce María Silva Hernández se casé con uno de los hombres más cercanos a Andrés Manuel López Obrador, el ex vocero César Yáñez Centeno.

Recordemos que la oriunda de Huamantla, cuya familia es dueña de la afamada empacadora Silva, fue perseguida política de Rafael Moreno Valle, por lo que pasó un largo periodo en prisión acusada por un supuesto fraude en la adquisición de un terreno, algo que nunca pudieron probarle de ahí que fuera absuelta y liberada.

Tras el vergonzoso capítulo montado por el gobierno poblano, Dulce María Silva decidió unir su vida en matrimonio con el ahora coordinador general de Política y Gobierno del próximo gobierno de Andrés Manuel López Obrador, quien nunca la dejó sola y, por el contrario, emprendió una campaña en medios y una batalla legal para limpiar la imagen de su novia y para que fuera excarcelada.

A la boda, nos confirman, llegará el presidente electo.

Pésame

Desde este espacio mi más sentido pésame a mi compañero David Pérez Toriz, por el sensible fallecimiento de su señora madre, Georgina Toriz Vázquez.

El equipo de Gentetlx también expresa sus condolencias por este conducto y eleva sus plegarias para que la familia Pérez Toriz encuentre pronto la resignación por tan enorme pérdida. Que descanse en paz.