Valiente
12 de septiembre - 2018

Por Edgardo Cabrera

Con grandes cartas credenciales llegó a Tlaxcala Eduardo Valiente Hernández para asumir el cargo de Comisionado Estatal de Seguridad.

Por la puerta de atrás y sin mayor reconocimiento se fue Herve Hurtado quien supuestamente “dejó el cargo” porque lo llamaron a Chihuahua, aunque no sabemos quién y para qué, ya que lo mismo podría ir a un puesto directivo en materia de seguridad, que de simples vacaciones.

Lo cierto es que el ex comisionado dejó mucho que desear, basta revisar la ola de atracos a bancos, empresas y particulares, así como la aparición de cuerpos masacrados con el sello característico del crimen organizado, aunque muchos de ellos, vale decir, fueron arrojados en nuestro territorio por poblanos.

La intolerancia a la crítica, por parte de la prensa así como de sus subordinados y compañeros de gabinete, es otro más de los asuntos por los que será tristemente recordado.

Ahora entra al relevo Valiente, quien ya fungió como Comisario General de la Policía Federal, Comisionado Estatal de Seguridad Ciudadana del Estado de México, Subsecretario de Seguridad del Estado de México, y Comisario Coordinador en Tamaulipas, Nuevo León y Coahuila.

Su llegada genera grandes expectativas considerando que le tocará recibir una ampliación de recursos humanos y materiales así como un nuevo marco legal que incluye mayores sanciones para quienes atenten contra los uniformados, pero también, de mayor rigor en contra de los giros negros que siguen operando impunemente en la entidad.

Como tíos Lolos

La gran mayoría de los alcaldes se han hecho como el tío Lolo, empezando por el de Chiautempan, Héctor Domínguez, en cuanto a endurecer las acciones de sus gobiernos contra los giros negros, llámese cantinas, bares, antros y table dance.

Recordemos que al cierre de la anterior Legislatura local fue reformado el marco normativo con el que quedó establecida la prohibición para el funcionamiento de centros de entretenimiento donde se presenten espectáculos con personas desnudas o semidesnudas, de igual forma fueron establecidos horarios máximos para los lugares con venta de bebidas alcohólicas.

Pero en los hechos los ediles se han hecho de la vista gorda, basta revisar lo ocurrido el domingo por la madrugada en Chiautempan cuando fue asesinado a balazos un sujeto, y dos más resultaron heridos, tras una riña en el bar “Antara”.

Los hechos ocurrieron cerca de las 4 de la mañana, cuando se supone ya debería estar cerrado y sin clientes ese lugar, pero no sólo eso, sino que dicho negocio operaba sin todos los permisos de la autoridad.

Pese al incidente el alcalde sarapero no se ha inmutado, por el contrario, los antros proliferan en su jurisdicción y funcionan con el consentimiento de su administración lo que nos lleva a cuestionar si a Héctor Domínguez le vale un cacahuate la ley, o si de plano es tan jugoso el ingreso económico que obtiene su gobierno por estos negocios.

Agandalle

Aquí y en China, lo ocurrido ayer en el Congreso de nueva cuenta se llama agandalle, lejos quedó aquella promesa de ser incluyentes y no concentrar el poder en una sola fuerza política, como ocurrió en la era de “la mafia del poder”.

Como ya lo habíamos anticipado, los nuevos mafiosos se agenciaron todas las comisiones legislativas importantes, algo que por cierto no gustó a miembros de su propia bancada, aún así, Finanzas y Fiscalización, Puntos Constitucionales, y Juicio Político fueron para los morenistas María del Rayo Netzahuatl, Jesús Rolando Pérez, y José María Méndez.

El resto de las comisiones, muchas de ellas de asuntos sin importancia, fueron para la chiquillada y sus aliados.

La aplanadora aplicada en el reparto de comisiones aplazó el agandalle de los órganos directivos y administrativos del Congreso previsto para el martes, nos dicen que ahora se hará el jueves.