Por Jose Luis Ahuactzin

Los regidores de Santa Cruz Quilehtla, se mostraron sin llenadera y abusivos al decidir -en un cabildazo- el jueves pasado que debían aumentarse el sueldo hasta un 55 por ciento sin importarles si afectaban o no las finanzas públicas municipales.

Se trata de cinco regidores de esta comuna, quienes con apoyo de los dos presidentes de comunidad en plena sesión de cabildo mayoritearon al alcalde, Oscar Pérez Rojas, así como a la síndica Elizabeth Cuatepitzi Sánchez , a fin de aprobar un incremento en su “humilde” salario de 15 a 25 mil pesos, y del alcalde de 16 a 30 mil pesos.

Ante esta situación las críticas no se hicieron esperar entre políticos y pobladores internos y externos, y con justa razón ¿cuál habrá sido el principal argumento para aumentarse el sueldo? Es y será la duda.

Ajenos y propios al municipio de apenas 23 años de creación municipal, dieron mal ejemplo al hacer este tipo de acciones que repudia la ciudadanía y de las que ya esta harta; además de que incitan a que otros regidores o alcaldes puedan repetir los mismos actos a diestra y siniestra.

Pero esto ya tiene un antecedente, al inicio de la administración de Oscar Pérez redujo su salario, así como el de su personal con el propósito de generar ahorros y llevar mayores beneficios a su comunidad, pero la irresponsabilidad, la avaricia y ambición hicieron de las suyas para que estos planes quedaran atrás y enterrados.

Lo cierto es que de acuerdo o no, el alcalde gozará de un buen sueldo mientras se analiza este asunto en el Congreso del estado, bueno eso si les da tiempo analizar a los 25 diputados.

Pero la suerte que estos nuevos políticos que pasarán a formar parte de la alta sociedad y alcurnia, es buena porque en el 2011 la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) emitió criterios en los que determinó que los Congresos estatales están impedidos para legislar y aplicarles un tabulador de sueldos, simple y sencillamente porque su autonomía es constitucional para el manejo de sus finanzas.