Lobo con piel de oveja
2 de agosto - 2018

Por Mauricio Hernández Olaiz

“Guardaos de los falsos profetas, que vienen a vosotros con disfraces de ovejas, pero por dentro son lobos rapaces. Por sus frutos los conoceréis. ¿Acaso se recogen uvas de los espinos o higos de los abrojos?”  Mateo 7, 15-16

De ser una simple fábula para niños, hoy sin duda, aplica para un personaje que ha estado presente en todos los medios, ya sea para ser desprestigiado, ya sea para ser defendido. Manuel Bartlett, uno de los grandes dinosaurios de la política mexicana, que lejos de sentarse en su cómodo sillón de más de 5 mil dólares y disfrutar de las riquezas acumuladas a lo largo de una extensa carrera política, se mantiene vigente, vivo, y sin ninguna intención de extinguirse.

Fue uno de los hombres más poderosos de la nación, eso todos lo saben, en donde manipuló, reprimió, amenazó, compró, vendió, exigió, prometió, tiró, recuperó, falló y volvió a fallar, pocos currículos tan extensos y cuestionados en la historia como el del Poblano.

Pese a todo y a todos, es uno de los hombres de más confianza de Andrés Manuel, nos guste o no nos guste. Opinemos en contra, lo denostemos o nos desgarremos las vestiduras, Bartlett irá a la CFE, con ese aparente nacionalismo puro e inquebrantable, con esa dureza, rigidez y hasta grosería en su trato, Bartlett estará ahí para “rescatar” el sector eléctrico nacional.

Algunos dicen que ha cambiado, que se ha transformado, que se ha hasta redimido, que hoy su único interés es la nación- Claro, con todo lo que le ha robado- pero que como siempre se defiende con ese cinismo tan característico que lo define como político.  Manuel Bartlett dirá, “quien tenga pruebas en mi contra, quién compruebe que le he robado un peso a este país, yo mismo me meto a la celda y tiro la llave.”

Ahí está la oferta, ¿habrá alguien que la tome?, lo dudo, pues quienes lo saben son beneficiarios de ello y los que no, seguro ya descansan en paz, o bien amenazados de descansar estarán. No simulemos, no se llega a los niveles de Bartlett siendo una oveja, tienes que ser un fiero lobo, capaz de despedazar en su momento, por necesidad o por hambre.

Pero La voracidad y ferocidad el antiguo Bartlett era conocida, respetada por temor, miedo o conveniencia, pero ese era el Bartlett de antes, Fiero Lobo de frente y sin tapujos, hoy es más peligroso, pues sigue siendo ese lobo, pero ahora con piel de oveja, que dice no corrompe, no roba, no amenaza, solo trabaja de la mano del de MACUSPANA y en beneficio de la nación.

No hay hombre más criticado por López Obrador que Salinas de Gortari, no hay hombre más Salinista que Bartlett, como también lo es Álvarez Lima, pero extrañamente AMLO ama a estos dos salinistas, el tendrá sus razones, nosotros solo podemos especular ante la muy pobre justificación que da el presidente electo para apapachar a personajes de este calibre, porque es cierto, no solo es Bartlett, hay muchos en esta Morena disfrazados de Oveja, pero ninguno como el ex secretario de gobernación y ex gobernador de Puebla.

Mis 5 minutos con Bartlett

Porque no fueron más, no los necesitó un experimentado político frente a un joven comunicador, no necesitó más para hacerme ver que simplemente yo no era de su equipo, ni de su agrado.

Me sentó Palafox con el coordinador del PT en el senado, con la promesa – oferta de ser el encargado de comunicación de la bancada, incluso un día antes así me había presentado Palafox frente a Ernesto Cordero, entonces como hoy, presidente de la cámara alta, hecho que no acabo de descifrar, si como un desmedido exceso de confianza o por engrandecer la mentira, el engaño y la manipulación de la senadora en mi contra.

Se me pidió presentara un proyecto de trabajo, la experiencia me había ya enseñado que había que remarcar los objetivos, entre más ambiciosos mejor, pero no enseñar los comos. El Know how jamás….así pues se le presentó…. lo tomó y lo puso en su escritorio, ni siquiera lo abrió, y sin tapujos me confirmó..”yo no sé hacer nada de esto, no sé cómo se haga y no me interesa, pero si conozco a mucha gente que  lo sabe hacer, gente que ha estado conmigo por años, yo a usted ni lo conozco”.

Seguramente espero de mi parte un rostro de sorpresa, incluso de temor, no los tuve, ni siquiera por un instante, yo sabía que algo así podía pasar, simplemente porque era lógico.

El continuó, “Marthita lo anda proponiendo, pero el coordinador soy yo, y estos cargos los define el coordinador, no la senadora Palafox, si gusta lo pongo en contacto con la persona que yo ya he designado para estas labores, ya ellos me definirán si es apto para el equipo o no”…Fue todo, abroche el botón de mi saco, le tendí la mano sin decir palabra y abandoné su oficina, acto seguido llamo a su particular a quién le entrego mi proyecto y le pidió se lo enviara a Luis Bravo, coordinador de comunicación social de la bancada del PT en el senado, en otras palabras, el verdadero.

Algunos días después me contactaron y me citaron en un céntrico hotel de Cholula, Puebla. Siempre atentos y amables me pidieron detallar como llevaría a cabo algunas de las propuestas contempladas en mi proyecto, específicamente en el streaming en web sites de programas de TV o Radio. Nunca les respondí, solo aclare que al no ser yo el coordinador, no podía aceptar trabajar tan solo como un miembro más y menos para entregar mis joyas de la corona, luego de fijada mi postura, agradecí su tiempo y me retiré.

Nunca más volví a ver a Bartlett, nunca más volví a ver a Palafox.

@olaizmau