Por Alfredo González

Apenas arrancamos el según tiempo de la final polaca y muchos ya no aguantan el mareo en este ida y vuelta de la democracia, las purgas en los partidos están a puntos de turrón, pues como si el flautista del cuento hubiera reaparecido las alimañas y corifeos ya se apresuran a abandonar los navíos.

Es el caso en la sede de la representación federal de Medio Ambiente, donde el Doc Angelito ya alista la caja de huevo para meter su vida en el interior, pues si buen aún no lo corren de su nueva chamba, si podrían hacerlo del tricolor por chaquetero.

Y es que el muchacho que recordamos votando a dos manos cuando proponían duplicarse el sueldo los regidores en Contla, por cierto un cargo que ocupo con el PRI, ahora decidido abandonar toda esperanza y rendirse a los brazos del Manzanero, promesa y Salvador del pueblo bajo el cobijo de la Peje Alianza, algo que apunta a ser un error más con consecuencias  cancerígenas a sus aspiraciones políticas.

Alguien acuérdese de los de enfrente

A propósito de las fugas. Mermas y malos Militantes… ¿Alguien que exista por ahí con intención de irse al frente?.

Hemos oído de cientos que se van a tal y cual, que abandonan a Anayita, incluida Margarita, pero nadie, en serio nadie se ha asomado siquiera a preguntar a los del frente si puede jugar en su patio, ¿qué tan mal estarán las cosas por allá entre puritanos y pseudo democráticos?, ¿el regreso del Orticismo a la Vecindad de Adriana fue entre mandarriazos y lágrimas de nostalgia?, ¿Será que ahora sí funcione el matrimonio por conveniencia?, ¿Insulting o Unaceptable?… Vaya secretos de cama entre esos tres partidos.

¿Una felicitación?

Cumplir una década, dos o tres en una labor social que aporta a la formación de nuevas generaciones es una labor más que plausible, que debe reconocerse y admirarse, algo que mucho docentes merecen que se les recuerde cada día y no solo los 15 de mayo.

Lo que no se vale, lo que no tiene madre, vergüenza y raya en el descaro, es aquellos que gozan de un lugar en el magisterio, parásitos que cobren o no, viven y mantienen un lugar ocupado y a la vez vacante, de nueva cuenta las malditas plazas o bases, ¿Verdad doña Lore?

La flamante y derrotada ex candidata a la gubernatura, que busca y aseguró ya de hecho hueso por milésima vez, no suelta la plaza de maestra de jardín de Niños por nada del mundo, pues pese a vivir del erario de otras formas, en su pírrica trayectoria docente jamás ha pisado una sola aula sino es para ganar simpatías y embaucar electorado, ¡Pero es docente con Plaza!, un buen ejemplo de lo aferrados y mezquinos que son algunos, apenas y ad hoc a las hordas de AMLO.