Eso lo dijiste tu, no yo: Promesas de plástico
11 de abril - 2018

Por Alfredo González

El panorama electoral en Tlaxcala luce más lúgubre que los pasillos del Alianza Ciudadana estos días, desangelado y con un modesto actuar de los candidatos a buscar huesos y curules en los escaños de representación popular y la grande… Los tiempos del dispendio y las dádivas quedaron en el sigilo del tiempo y relegadas a la clandestinidad que las caracterizaba, ya no se ve al candidato rodeado de la comitiva de corifeos y rémoras que le aplaudían casa paso, casa calle y cada que entregaba la plancha o la licuadora.

Las campañas  electorales, como los medios de comunicación, los hobbyes y casi todas las cosas han migrado a la digitalización, al universo paralelo del Internet que mantiene una estrecha y enfermiza cercanía con esto que llamamos humanidad.

Hoy en día ya no es necesario moverte ni un centímetro para hacer compras, pagar algo o siquiera para comunicarse, el sedentarismo absoluto nos está alcanzado, y la «polaca» no es ajena a ello… Pues desde cualquier lado, incluso desde Rusia se burla un imbecil Manuelovich, puede inferirse en la conciencia de los electores, pueden comprarse voluntades, cometer fechorías electorales y ¿Por que no?, ganar un montón de sub desarrollados que defiendan a capa y espada a un «mesías» auto proclamado que salvará a México, absolverá de los pecados a los delincuentes y por arte de magia, volverá a nuestro país una potencia que ni Obama pudo, al menos en sus perturbadas mentes.

La idea de una cultura plástica y artificial que priva en diversos sectores contaminó la política local y nacional, donde el buen oportunista ha comenzado a capitalizar con creces las carencias y reclamos sociales, pero claro, aún cuando las explote para conseguir su emberrichado fin, no quiere decir que vaya a hacer algo para solucionarlo, y pero aún si lo hace no es garantía de que funcione, pero en fin… Soñar no cuesta nada.

La receta infalible es más perversa y profunda de lo que pudiera pensarse, pues más allá de realmente buscar una manera de combatir los problemas, ha dado a los mexicanos una nueva excusa para no esforzarse por el progreso.

Es curioso ver día con día como las personas abarrotan las filas para recibir apoyos de las instituciones públicas, pues para millones resulta más cómodo ver y ser parte de las «Luchonas» que buscan incrementar la población y recibir una mensualidad por ello que buscar un trabajo redituable, vaya dignidad que es premiada con alcohol en fin de semana pagado con las tarjetas del Prospera.

Y es que aunque en teoría los programas asistenciales nacieron como una estrategia de apoyo y ayuda a quienes necesitan un impulso para hacer, la perversión de los vivaces ha encontrado como hacer un quiste social con millones de mantenidos, por que aunque ahora suene desquiciado, las pensiones y todos los apoyos nos llevarán al Dejpeñadero real y a la debacle económica…

Los perros de la doña

Si alguien aun dudaba que esta elección se parece cada vez más a la de 2016, dele un vistazo a las redes sociales, donde los Lore Chiaros han comenzado a dar hasta con la cubeta a quien sea o lo que sea, pues como gatos panza arriba defienden a la licenciada y su mesías para que ni el viento les toque la cabellera.

La táctica de agresión, insultos y denostación de las hordas al servicio de la protomartir de la violencia política han mostrado tener la piel mal sensible que paciente con quemaduras, pues a la menor expresión de apoyo a cualquier otro ser vivo, lanzan sus improperios sin distingo, una cavernícola reacción a las que nos tienen acostumbrados.

Que alguien le comente a la doña que sus perros se han soltado, y que además de morder la correa, han comenzado a morder todo lo que encuentran, hasta ellos mismos, pues las tradiciones y divisiones en lo que queda de su estructura comienzan a hacerle un nuevo boquete a su candidatura y su sueño de perpetuarse.

La señora se ha distraído con el dispendio de regalitos, pues se les ve muy agiles acarreando las cobijas  despensas y playeras desde las bodegas en Ocotlán, Acuitlapilco y Zacatelco para buscar simpatías y apoyo que olvidará el próximo 2 de julio, cuando nuevamente no le sirvan ni para llorar una nueva derrota, vaya idilio.