Manicomio
12 de enero - 2018

Por Edgardo Cabrera

Nos enteramos que al interior de la administración municipal de Apizaco han empezado a enloquecer algunos funcionarios que sueñan con ser candidatos a diputados locales.

Resulta que a finales del año pasado un grupo de estos soñadores se reunieron para celebrar una posada que en verdad se convirtió en el pre destape de la Síndico, Anabel Alducin, como aspirantes a legisladora.

Sin contar con la venia de su líder político, en esta caso el alcalde Julio Hernández, y alentada por algunos albiazules rebeldes (dicen que adrianistas en su mayoría), aquella fiesta de fin de año se convirtió en un mitin político al que solamente asistieron los muy allegados a la síndico, entre ellos el jurídico Omar Muñoz.

A partir de ese momento quedó claro el distanciamiento con el edil, tan es así que derivado de sus pretensiones políticas ha empezado a entorpecer algunas tareas administrativas y legales.

Lo cierto es que Anabel equivocó la estrategia al auto destaparse e intentar formar un grupo interno antagónico al alcalde, el problema es que en el PAN aún no saben si el distrito IV será otorgado a mujer o varón (dados los criterios de equidad), pero no sólo eso, sino que será precisamente Julio Hernández en acuerdo con Carlos Carreón quiénes palomearán al candidato (a) y lo mismo podrá ser un personaje de la administración que alguien externo.

Por ejemplo, sabemos que dentro de los soñadores aparece Carlos Quiroz, director de la Capama, quien también ya anda por su cuenta promoviendo sus intenciones de llegar al Congreso local.

A la lista le agregaríamos el actual tesorero, Iván Cuapanteca, quien hasta el momento se ha mantenido quieto e incluso ha corregido sus conductas fiesteras, sólo resta ver sino cae también en la tentación de moverse antes de tiempo.

Y por la parte externa se encuentra el vocero del CDE del PAN, Víctor Loranca, así como el primer regidor apizaquense Pablo Badillo, personaje muy cercano al ex alcalde Adolfo Escobar quien enfrenta acusaciones y goza de un amparo judicial ante una orden de aprehensión por su presunta responsabilidad en el ejercicio indebido de sus funciones.

Curioso

A colación de Adolfo Escobar, llamó la atención la celeridad con la que el ex alcalde capitalino panista obtuviera un amparo para librar cualquier orden de aprehensión en su contra, lo que evidencia que hay fuga de información ya sea en el OFS o la PGJE.

La que no corrió con la misma suerte de protección fue su ex tesorera Norma –N- quien fue detenida y encarcelada acusada de los delitos de uso indebido de atribuciones y funciones durante su desempeño en la administración de Escobar, a la cual se le fijó una fianza de 250 mil pesos para enfrentar las acusaciones en libertad.

Pero lo más curioso es que el alcalde de Chiautempan, Héctor Domínguez se apresurara a dar una atropellada rueda de prensa para deslindarse de doña Norma a la que contrató como tesorera de la comuna sarapera.

Este sujeto que cobra como alcalde tuvo el descaro de asegurar que desconocía los antecedentes de su empleada y que conoció los problemas que enfrentaba ante el OFS y la PGJE hasta que ella misma se los dijo cuando pidió su renuncia en noviembre pasado.

Lo grave de su desatinado deslinde radica en que estamos ante una autoridad que ignora los antecedentes de su equipo cercano por lo que no sería raro que al paso de los meses salgan a relucir otros casos similares o peores.