Por José Luis Ahuactzin

Durante la visita Tlaxcala por el precandidato presidencial de la alianza «Por México al Frente», Ricardo Anaya, dijo que las virtudes de la alianza y de unir fuerzas es «para lograr el objetivo de derrocar al PRI y cambiar de régimen en favor del país.

«Vamos a llegar al gobierno para hacer el cambio profundo que necesita el país, por eso era importante que los tres partidos, cuatro en el caso de Tlaxcala, nos pusieramos de acuerdo para un frente contra el régimen, era indispensable hacer la coalición e hicimos posible lo que parecía imposible, con esa coalición transformaremos al país…».

Tras reunirse con decenas de militantes panistas y simpatizantes, Ricardo Anaya, pidió apoyar a los candidatos del PAN, PRD y el MC » a fin de acabar con el pacto de unidad que mantiene tejido el Partido Revolucionario Institucional en Tlaxcala.

Presumió que el PAN en coalición con el Sol Azteca, pudo hacer historia en 2016 al ganar las gubernaturas de Veracruz, Quintana Roo y Colima, lo cual «fue un ensayo» de lo que pretenden hacer en este 2018, para conseguir la Presidencia de México.

«Y romper el acuerdo de impunidad, lo que significa que el Gobierno siguiente no le cuidará las espaldas a Enrique Peña Nieto…», dijo a los asistentes.

«Cuando ganemos en Tlaxcala se va a acabar el pacto de impunidad. No va a haber venganzas, pero los corruptos van a enfrentarse a la Ley».

Explicó el «brutal» aumento del entre el 20 y  el 50 por ciento de los insumos más importantes como la gasolina, el gas y la electricidad, así como la deuda que «irresponsablemente» ha adquirido el Gobierno priísta en detrimento de todos los mexicanos.

Anaya aseveró que en los estados donde gobierna la coalición encabezada por el PAN, la economía ha crecido 200 por ciento más rápido que donde se encuentra el PRI, lo que significa gobiernos inteligentes, visionarios y que no se oponen al desarrollo, mucho menos a costa de la pobreza de la gente.

Dijo que tiene muy claras sus prioridades: acabar «de raíz» con la corrupción mediante un gobierno honesto, acabar con la pobreza externa y reducir la desigualdades, que el que viole la Ley la pague, que la economía crezca para todos, tanto en la ciudad como en el campo, dignidad frente a los Estados Unidos; y a recuperar la paz y la tranquilidad con una estrategia eficaz.