Pésima comunicación
20 de diciembre - 2017

Por Edgardo Cabrera

Al igual que en el plano nacional, en lo local la coalición “Por México al Frente” adolece de una adecuada estrategia de comunicación, todos quieren hablar y terminan por caer en contradicciones.

Luego de que presentaran con bombo y platillo la inclusión de facto del PAC a la alianza entre el PAN-PRD-MC, sus nuevos integrantes fueron los primeros que, como reguero de pólvora, corrieron la voz de cómo quedó el reparto de candidaturas, empezando por el distrito II donde ellos pactaron el espacio para la sobrina consentida de los Ortiz, doña Alejandra Ramírez.

También desde las entrañas de los partidos salió la información de que el PAN se agandalló los distritos I y III, así como el segundo lugar de la fórmula al senado, mientras que al PRD lo relegaron a abanderar solamente la candidatura de la coalición a la senaduría.

Los nombres de los inminentes candidatos también salieron de ellos, nadie inventó eso de que Humberto Macías y Juan Carlos Sánchez, así como Alberto Amaro y Minerva Hernández fueron los ganones, aunque lo nieguen, así será.

Sin embargo no pasó ni un día y empezaron las negaciones del reparto, primero Manuel Cambrón y luego Carlos Carreón, Cuco Rivas ni habló, al fin de cuentas no tiene vela en el entierro porque no le tocó nada al Movimiento Ciudadano.

En contraste, los ortices le reviraron a los líderes amarillos y azules, convocaron a una rueda de prensa y ahí admitieron que SÍ hay reparto y que ellos tienen el II distrito.

En suma, hablamos de que la comunicación no es lo de ellos y eso les costará muy caro (recordemos el 2016). En sólo tres días evidenciaron contradicciones y torpezas, es evidente que carecen de un vocero capaz de hablar a nombre de los cuatro con acuerdo de por medio.

De mantenerse en esa ruta, cuando lleguen a las candidaturas locales (que sabemos que también ya están prácticamente repartidas) les reventará una bomba.

Por la misma ruta

Quienes tampoco cantan mal las rancheras son los del PRI, solamente en la casa de Florentino Domínguez saben que él es el dirigente de un partido.

Nadie sabe dónde está y qué hace el “profe”, por el contrario, en lugar de tener una estrategia proactiva que permita posicionar a su partido de cara al 2018 (año que también hay elecciones locales) pasa todo lo contrario, se ha convertido en un ente simplemente reactivo.

Basta checar lo que ocurrió el lunes con un reducido y desconocido grupo de priístas que se calificó como “corriente crítica del PRI”.

La verdad es que nadie los conoce, pero hicieron ruido y acusaron a Florentino de cerrazón. REACTIVO, el profe salió un día después para “comunicar” por medio de un boletín que había recibido y escuchado a los inconformes.

El dirigente pescó el anzuelo.

Lo cierto es que esos desconocidos simplemente le hacen el juego sucio a la oposición, basta revisar sus antecedentes.

Si bien el PRI estatal tiene líder moral, en este caso el gobernador Marco Mena, la dirigencia no puede esperar a que todo les resuelva el mandatario, quizá por ello y ante la falta de resultados el primer priísta de Tlaxcala permitió que su hermano Fabricio asuma una cartera en el Comité estatal para darle impulso a la maquinaria tricolor que cayó en el marasmo después de la elección del año pasado.